La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ya investiga si el cadáver de un bebé, que fue encontrado en el basurero de un penal de Puebla, fue sustraído de algún anfiteatro capitalino y precisó que no se tiene alguna denuncia presentada al respecto.
En la semana pasada, Reinserta reveló que un interno del Penal de San Miguel en Puebla, Puebla, había encontrado el cuerpo sin vida de un menor de edad de tres meses en un bote de desperdicios.
Ante esto, personal de la Fiscalía de Búsqueda de Personas Desaparecidas se puso en contacto con autoridades de esa entidad para determinar el origen del cadáver.
Se amplió la búsqueda en anfiteatros capitalinos, a fin de determinar si el cadáver fue sustraído de alguno de ellos, aunque de momento no se cuenta con una denuncia presentada sobre la desaparición de algún de cuerpo con esas características.
Desde la organización civil Reinserta se ha manejado la posibilidad de que el cuerpo del bebé haya sido utilizado para ingresar drogas al penal.
Al respecto, la presidenta y cofundadora de la asociación, Saskia Niño de Rivera, comentó para El Sol de Puebla que el penal de San Miguel enfrenta un problema de autogobierno, por lo que ésta hipótesis cobra mayor relevancia.
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