El secretario de Seguridad Pública del Estado de Zacatecas, Ismael Camberos Hernández, dio a conocer, luego de inspecciones exhaustivas, que se encontraron en las celdas de internos en los Centros Regionales de Reinserción Social (Cereresos) de los municipios de Fresnillo y Zacatecas, más de mil dosis de enervantes; armas de fuego; una narcomanta y una granada; por lo que no se descarta la existencia de complicidad entre custodios e internos.
Ante medios de comunicación local -afuera del Cerereso Varonil de Cieneguillas, Zacatecas-, Camberos Hernández informó que, luego de que el departamento de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) advirtiera de la existencia de objetos que ponían en riesgo la seguridad en los centros penitenciarios se inspeccionaron celdas y espacios comunes en ese penal y en el del municipio de Fresnillo, acción en la que participaron 50 efectivos policíacos.
Cada uno de los operativos se realizaron en tres horas y media.
ACCIONES EN FRESNILLO
Así, a las 06:00 horas de ayer se inició un operativo con elementos de la Policía Estatal en el Cerereso de Fresnillo, el cual finalizó tres horas y media después (9:30 horas) y se encontró un arma de fuego de calibre 9 milímetros, con cargador abastecido y 15 cartuchos útiles; ocho teléfonos celulares y 11 cargadores para teléfonos celulares; pipetas; puntas hechizas y 639 bolsitas de plástico que en su interior contenían hierba verde, con las características propias de la marihuana y que en su conjunto dieron un peso total de dos kilos.
EN CIENEGUILLAS
Respecto a la revisión en el Cerereso de Cieneguillas, el titular de Seguridad Pública Estatal dio a conocer que comenzó a las 10:30 horas y terminó tres horas y media después (13:30 horas), en la que participaron elementos de la Policía Estatal y allí, sostuvo, se realizaron hallazgos más alarmantes. Se encontró 493 dosis y 23 bolsitas de hierba verde con las características propias de la marihuana; 12 teléfonos celulares y cinco pipetas.
POSIBLE COMPLICIDAD
Según el secretario de Seguridad Pública del Estado, se ignora la identidad de los propietarios de lo encontrado, pues fueron hallados en zonas de convivencia común; como talleres, áreas verdes, pasillos y bodegas y no en las celdas particulares.
Asimismo, y ante las interrogantes de los medios de comunicación, Camberos Hernández no descartó la existencia de alguna complicidad de los custodios penitenciarios con los internos, pues ante los hallazgos, no cabe otra posibilidad.
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