Una niña de 8 años que estaba extraviada en el barrio de San Juan de Dios, pudo reencontrarse con su mamá, luego de pedir ayuda en la Zona Pulso de Vida.
La menor al estar extraviada encontró a una mujer que la llevó a la Zona Pulso de Vida ubicada en Calzada Independencia y avenida Javier Mina, en el Centro de Guadalajara, por lo que se envió a personal de la Policía tapatía.
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Mientras llegaban los policías, la adulta, dijo que la menor estaba extraviada, por lo que se pidió también a la intervención de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas (UBPD).
Posteriormente, los ciclopolicías hablaron con la niña, quien dijo que estaba bien pero no recordaba mucha información sobre su domicilio. Fue el personal de la UBPD, el que logró encontrar el domicilio de su abuela, en la colonia Rancho Nuevo.
Los uniformados la llevaron con su abuela, quien les dijo que su nieta vivía con su madre, en el Centro Histórico y les proporcionó el domicilio, logrando el reencuentro.
Otra menor fue ayudada a reunirse con su familia
En otro caso, la UBPD ayudó una joven, de 18 años que reportó que estaba una niña sola, dormida en una banca, en avenida Alcalde e Independencia, en el Centro Histórico.
Policías del Centro Histórico acudieron y hablaron con la niña para ofrecerle ayuda, mientras llegaba el grupo de búsqueda.
La menor, dijo tener 11 años, y quería ayuda para encontrar a su familia. Por medio de redes sociales los elementos encontraron publicaciones de sus padres, que decían estarla buscando.
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Los uniformados contactaron con su mamá, quien estaba en la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas y como no tenía en qué moverse, los oficiales enviaron una unidad por ella.
Tras reunirlas, los policías llevaron a ambas de nuevo a la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidos para cerrar la carpeta de investigación que se había iniciado.