El 10 de mayo no es igual para todas las madres, pues mientras algunas pueden festejar este día, otras no tienen nada que celebrar, porque sus hijos están desaparecidos. Ellas exigieron a través de una marcha más personal para atender la identificación y la entrega de cuerpos, lo que ha hecho crisis en el Servicio de Medicina Forense.
Partieron de la glorieta de las y los Desaparecidos, en Chapultepec y Niños Héroes hacia Casa Jalisco. Las que no tienen ninguna noticia de sus hijas e hijos reclamaron a las autoridades su lenta actuación. Es el caso de María Guadalupe Aranda González, quien busca a su hijo Roberto de Jesús Cruz Aranda, visto por última vez cuando tenía 19 años, el viernes 25 de junio del 2021.
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Esa noche llegó a su casa como siempre, cuando llegó un amigo con el que salió hacia la esquina de su domicilio, y de ahí se lo llevaron unos sujetos que lo estaban esperando. “Las autoridades no han querido interrogar a ese amigo, es el único testigo que yo tengo de que me diga dónde está mi hijo, qué pasó con él. No pido culpables, simplemente que me digan dónde está mi hijo, es lo único que pido”.
Desde ese día María Guadalupe no ha parado de buscar a su hijo junto con sus compañeras del colectivo Corazones Unidos en Busca de Nuestros Tesoros.
Ha visitado el Semefo, hospitales y fosas, pero hasta el momento no ha obtenido resultados positivos.
“Hemos ido a muchas partes, a las personas que nos han ayudado a decirnos dónde pudiera estar mi hijo hemos buscado, hemos tocado hasta Derechos Humanos, Fiscalía, en todos los lugares hemos pedido el apoyo y el único apoyo que hemos tenido es el colectivo, porque son personas que sienten lo mismo que siento yo”.
Después de que desapareció su hijo, el Día de las Madres ya no ha sido igual, a pesar de que tiene dos hijas más, por las cuales ha salido adelante.
“No, ya no, o sea, intentamos seguir adelante porque tenemos más hijos que nos necesitan pero nuestro 10 de mayo cambió, cambió definitivamente pero nosotros tenemos fe y estamos en la lucha de que algún día lo podamos encontrar”.
Participaron más de 50 madres de familia, esposas y hermanas para quienes la inseguridad y este delito de desaparición de persona les cambió abruptamente la historia, todas ellas integrantes de las agrupaciones Luz de Esperanza y Corazones Unidos en busca de Nuestros Tesoros.
Datos del Sistema de Información sobre Víctimas de Desaparición (SISOVID), en Jalisco se tienen registradas 14,784 personas desaparecidas al corte del 30 de abril.
Del total 13 mil 24 son hombres y mil 760 son mujeres.