La principal línea de investigación en torno al asesinato del director de la Policía Municipal de Jalostotitlán, Osvaldo García, ocurrida el domingo en una gasolinera del municipio de Zapotlanejo, gira en torno a represalias por sus acciones en contra de la delincuencia.
El fiscal del Estado, Gerardo Octavio Solís Gómez, indicó que el comisario participó en operativos y detenciones en conjunto con autoridades estatales y federales, por lo que éste pudiera haber sido el motivo por el cual lo privaron de la vida. Agregó que no se tiene registro de amenazas recibidas en su contra.
“Por información de su escolta que fue de los primeros que dieron una entrevista, no había recibido amenazas recientemente. Sin embargo fueron múltiples y variadas las detenciones y la participación en operativos conjuntos, de donde consideramos que pudiera haber originado la agresión, pero alguna amenaza reciente reflejada en alguna carpeta o algún comentario a sus superiores o compañeros de trabajo, parece que no se manifestó así”, explicó.
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Cerca de las 13:50 horas del domingo, el jefe policíaco, que se encontraba en su día de descanso; su escolta, y dos mujeres llegaron en un auto Tiida blanco, a una estación de servicio que se localiza en el kilómetro 7 de la autopista a Los Altos, a 1.3 kilómetros antes del entronque con la carretera libre, en dirección a Guadalajara.
Se estacionaron. Las mujeres y el escolta ingresaron a los baños, y Oswaldo García se quedó afuera esperando. En ese momento se presentaron varios sujetos en una camioneta pick up doble cabina blanca, y abrieron fuego en contra del director de la policía de Jalostotitlán, quien murió al recibir múltiples impactos de bala.
Consumada la agresión, los causantes escaparon. Las mujeres y el escolta salieron al escuchar los disparos y vieron a Oswaldo tirado boca arriba, con las llaves del auto en la mano izquierda. Los testigos llamaron al 911 para pedir ayuda.
A los pocos minutos llegaron los paramédicos de la Cruz Roja Zapotlanejo, quienes sólo confirmaron el deceso.
En el sitio quedaron 40 casquillos de fusil de asalto, que fueron asegurados por peritos de Ciencias Forenses.
Al menos ocho elementos de diferentes corporaciones de seguridad han sido asesinados en lo que va del año en el estado.
El 25 de enero tres policías de Teocaltiche murieron en una emboscada.
El 6 de marzo, dos agentes de Fiscalía del Estado perdieron la vida en un enfrentamiento en Las Huertas, en Tlaquepaque.
El 18 de marzo, un custodio del Cefereso 2 de Puente Grande fue victimado a tiros en la Carretera a Zapotlanejo, a bordo de su motocicleta.
El 15 de mayo, una mujer policía de Tlaquepaque fue privada de la vida al salir de la Cruz Roja Toluquilla, después haber terminado su turno de vigilancia en el puesto de socorros.
Desaparecido
El 3 de enero, un policía de Guadalajara fue privado de la libertad por unos sujetos. Hasta la fecha se desconoce su paradero.
El 1 de enero otro policía tapatío fue localizado sin vida y con impacto de bala en la colonia San Gaspar, en Tonalá. La Fiscalía no ha informado si se trató de un homicidio o suicidio.