Familiares y amigos de María Guadalupe Alcalá Macías, le dieron el último adiós, luego que sus restos permanecieron durante 8 años en el Servicio Médico Forense y en el panteón forense de Coyula.
La tarde de este jueves se realizó la misa de cuerpo presente en la Capilla Guadalupana, del panteón Paraíso Eterno Valle de los Cipreses, de la carretera La Venta-Nextipac, en La Venta del Astillero.
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En la misa se pidió por el descanso eterno de María Guadalupe, cuyo caso ha causado indignación entre la ciudadanía jalisciense.
El sacerdote que ofició la misa señaló que tanto él o las personas que se enteraron del caso, sintieron molestia contra el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
"Fue una negligencia lo que tuvieron y para cualquier ser humano que tiene a una persona desaparecida o que haya muerto y lo tenga el Semefo, sabemos las normas y las reglas que tenemos que seguir, pero esto que pasó con ustedes, a muchos nos molestó, nos inquietó bastante, y por naturaleza humana íbamos a sentir mucha gente este dolor también, solidarizándonos con ustedes ante la pérdida de su ser querido y sabiendo que ustedes durante ocho años estuvieron en la búsqueda junto con las Madres Buscadoras".
También agradeció a Dios que sus familiares la encontraron.
"Quizá en su momento humanamente hablando se siente el coraje, pero al mismo tiempo agradecerle a Dios porque ahí estaba enterita, ¿verdad? Y no estaba por ahí ya en otro lugar, quién sabe dónde, y quizá no completa, y gracias a Dios enterita ahí estaba. Bendito sea Dios".
También se pidió a Dios por las Madres Buscadoras para que continúen con su labor y por las familias que tienen seres queridos desaparecidos.
Al concluir la misa, los restos de María Guadalupe fueron sepultados en ese parque funeral.
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