Otras cuatro personas de las halladas en el canal de aguas pluviales de Ixtlahuacán de los Membrillos fueron identificadas, con lo que ya suman siete las reconocidas, por lo que ya sólo quedan en la morgue 12 hombres y una mujer sin ser reclamados.
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El padre de la cuarta víctima se presentó la noche de este lunes en las instalaciones del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, para tratar de localizar a su hijo. Fue por medio de sus tatuajes que lo reconoció; el fallecido tenía 30 años de edad y su domicilio se ubicaba en el fraccionamiento Los Cántaros, en el municipio de Tlajomulco.
Los parientes aseguraron que tenían poca relación con éste aunque mantenían comunicación a través de una aplicación del teléfono celular, misma que dijo perdió desde las primeras semanas de enero, creyendo que se encontraba fuera de la ciudad por motivos de su trabajo.
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Por la tarde del martes, la Fiscalía Estatal informó que otras dos víctimas fueron identificadas. La quinta identificación se logró mediante las huellas dactilares que permitieron esclarecer que el hombre es originario de Jalisco y el Sistema Automatizado de Identificación de Huellas Dactilares (AFIS) reveló que podría ser vecino de El Zapote, en Tlajomulco de Zúñiga, por lo que agentes trabajan en ubicar a los consanguíneos de la víctima que contaba con antecedentes penales.
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En tanto que la sexta víctima fue reconocida por sus tatuajes. Era un hombre de 37 años, de oficio cocinero, vecino de Ixtlahuacán de los Membrillos, y quien fue reconocido oficialmente por sus familiares, quienes dejaron de verlo en diciembre de 2018 cuando no llegó a la reunión familiar de Navidad, cosa que no les extrañó porque anteriormente había desaparecido durante un mes.
El séptimo cuerpo es el de un hombre de 45 años, reconocido por sus tatuajes. Sus familiares dijeron que no lo veían desde finales de febrero.
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