Un video de una canción contra el abuso sexual infantil que se publicó en redes sociales le cambió la vida al maestro Pedro Abisaín Cota Corral quien da clases en una primaria de Guadalajara.
El profesor dejó Los Mochis, Sinaloa, su ciudad natal hace 9 años para buscar una nueva oportunidad de trabajo y en la Perla Tapatía la encontró.
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"Aquí encontré mi lugar, encontré muchas oportunidades y a raíz de eso aquí estoy en Guadalajara" dijo el maestro Pedro también conocido como Maestro Miel o Petter. Actualmente da clases a niños de primer grado en la escuela primaria Melchor Ocampo de la colonia López Portillo, de la capital de Jalisco. Su forma de vestir es peculiar porque viste camisas con estampados de personajes de caricaturas lo cual hace atractivas sus clases y con ello capta la atención de sus alumnos.
"Tengo nueve años siendo maestro de primer grado. Anteriormente ya había sido maestro en mis prácticas; di clases en preparatoria, en secundaria; daba clases a niños con Síndrome de Down allá en Sinaloa. Hice examen para mi plaza y que me la gano, me mandan a Tlajomulco".
Para llegar a la escuela que se le asignó en San Sebastián el Grande hacía dos horas de ida y otras dos de regreso, sin embargo su pasión por educar aminoraba eso. Confesó que fue muy feliz durante el tiempo que estuvo allá porque pese a las problemáticas sociales encontró muchas oportunidades ahí.
"Yo sé cuidar mi cuerpo"
Al sentirse desilusionado y desvalorizado el profesor Pedro pensó en 2023 "tirar la toalla" y dedicarse a otra cosa pero un día compuso una canción inspirado en una versión peruana. Vio la versión original en un libro de texto, hablaba sobre el cuidado de manos.
Al considerar el alto índice de abusos sexuales en menores de edad le hizo arreglos para enseñar a los niños y niñas a cuidarse para no ser víctimas de ese delito. La canción que habla de proteger el cuerpo de personas que lo quieran tocar y hablar el tema, la subió a TikTok y rápidamente se viralizó en esa red social.
"Toca el tema sobre el cuidado del abuso sexual infantil. Empezó como una motivación y terminó siendo una necesidad de hablar de estos temas tan delicados, más cuando los niños son pequeños y se me hizo muy bonito que se haya viralizado, para que los niños entre esa búsqueda encuentren algo positivo para su propio bienestar en las redes sociales que están llenas de mucha basura".
Aseguró que empezó a documentarse, puso en práctica su maestría en psicoterapia con enfoque gestal; comenzó a concientizar a los niños y no fue sencillo pero sus alumnos estaban receptivos a la música. "La retomé de una campaña que se hizo en Perú en 1991, la pasaron en el Ministerio de Educación e hice la canción más pequeña con palabras entendibles para ellos y a raíz de eso nos hicimos virales en las redes sociales y a partir de ahí empecé a generar estrategias dinámicas".
Su intención es que los niños no vieran situaciones de abuso como normales y que por el contrario, las denunciaran a los adultos. La canción sirvió de manera preventiva para otros menores en países fuera de México, algo que jamás imaginó.
Compartió que en dos ocasiones fue contactado por padres de familia de otros países que le agradecieron que existiera la canción ya que por medio de ella se dieron cuenta de abusos hacia sus hijos.
"Los papás me ponen 'yo miré la canción con mi hijo, se la enseñé y en ese momento detectamos que mi papá abusaba de mi hija' entonces es muy fuerte, muy impactante el hecho de que algo tan simple puede obtener muchísimos resultados en cuestión de prevención también".
Luego siguió con canciones con temas respectivos al cuidado del medio ambiente, de los animales, sobre el bullying, de no opinar del cuerpo de las personas, entre otros, pero lo prioritario es que los pequeños se cuiden del abuso.
Confiesa que el éxito que se generó en redes sociales fue como un llamado para decirle que estaba en el lugar adecuado tras los sentimientos de cansancio y hartazgo que llegó a sentir antes de eso.
"Lo que me llena y me pone más feliz es ayudar a muchísimos niños. Me he viralizado aún más y ese es el compromiso que tengo y con las infancias de México".
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El ser viral y por su talento y aportación a la prevención del abuso sexual hizo que el Congreso de Chihuahua le entregara el doctorado honoris causa; por excelencia al éxito docente en el Inetep de Colima. Asimismo la Universidad Autónoma de Sinaloa donde estudió le entregó un premio como egresado de esa casa de estudios y uno más en el Centro Universitario del Sur de la Universidad de Guadalajara. Pese a los premios que por su puesto valora, afirmó que el mayor reconocimiento es el de la escuela donde da clases.
"El reconocimiento que yo tengo aquí con los niños, el amor que me dan, el de mi comunidad y compañeros de trabajo".