Desde hace una semana, la familia de Tadeo, el bebé que murió tras el incendio a un camión de transporte público el pasado 21 de mayo, ha sido presionada por personal del hospital de Galveston, Texas, donde atienden a Elizabeth, la madre del menor, por las quemaduras que sufrió, pues aseguran que ya no hay recursos para continuar su tratamiento.

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“Nos dice que (en el hospital) le dijeron que ya no había recursos y que de hecho se debe una pequeña cantidad y queremos que ella esté tranquilla allá, que la sigan ayudando”, explicó Noemí Herrera, tía de Elizabeth.

En entrevista con EL OCCIDENTAL, expuso que su cuñada, la madre de Elizabeth, la ha acompañado desde que fue trasladada al hospital estadounidense y su evolución “va muy lenta” y la mayor parte del tiempo está dormida, sin embargo, los médicos le aseguran que se va a recuperar, aunque se necesita dinero. “Ya no sabemos cuál es la verdad, pero yo creo que no hay porque sino, no tendrían por qué decirle a ella que no hay dinero”.

Nos sentíamos bien hasta que nos llegó la noticia de mi cuñada, que dice que ya no la están ayudando. Estábamos felices porque parece que gracias a Dios va a salir adelante, pero necesitamos que la ayuden

Sobre el papá del pequeño Tadeo, explicó que ya está mejor emocionalmente tras la muerte del bebé, pero ahora le preocupa la salud de su esposa.

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