Aunque en los ingresos usuarios pueden encontrar gel antibacterial, lo cierto es que no todos lo usan y muy pocos en realidad respetan la sana distancia en las estaciones del Tren Eléctrico de Guadalajara.
Las prisas o el hastío con que la mayoría se moviliza hace no solo que ignoren el gel, sino que tampoco se preocupen por usar correctamente los cubrebocas, a pesar de que en estaciones como la de Juárez, algún que otro vigilante se encarga de exigir a gritos este requisito al ingresar.
Chécalo:
A decir de algunos vigilantes, al inicio estaban de manera constante, en los respectivos ingresos, vigilando que nadie entrara sin cubrebocas, sin embargo, refieren que conforme avanzaron las semanas este aspecto se relajó pues son demasiados usuarios los que entran al día.
Por estación regularmente hay dos guardias, uno en cada sentido, y en estaciones más amplias como la de Juárez se contabilizan seis, además de los elementos al interior, que en general vigilan que todo marche en orden. Aunado a esto, se encuentra personal de aseo que con regularidad se la pasa trapeando.
No obstante, ni con esta "vigilancia" o medidas se acatan las disposiciones, pues unos a las carreras toman gel, otros ni voltean a ver el contenedor, mientras un tanto más se coloca por protocolo el cubrebocas, antes de entrar, y muchas de las veces sin llegarse a tapar siquiera la nariz.
Al interior de los vagones la sana distancia es algo que no existe aunque se quisiera aplicar, pues aunque persisten las medidas de restricción en cuanto al aislamiento social, en ciertas horas del día la afluencia es mayúscula, suscitando aglomeraciones.
"En la línea 2 para Cristóbal de Oñate rumbo al centro, a ciertas horas era imposible tomar el primer tren porque ya venía llenísimo. Aunque sí se ve mucha gente, yo al menos en la mañana que salgo a trabajar ya me puedo subir sin problemas, aunque como te digo sí va lleno", refiere una usuaria de regreso a su casa.
Aunque no todos lo usan correctamente, la mayoría entra con cubrebocas. Las señaléticas indicando la obligatoriedad del uso del cubrebocas están postradas en diversas partes, aun así, tal cual ocurre en las calles de la ciudad, no faltan aquellos que no acatan estas u otras medidas.