/ miércoles 16 de octubre de 2024

UdeG abandona a familias de estudiantes de personas desaparecidas

Investigadores y activistas proponen la urgencia de formalizar y generar un diagnóstico de búsqueda de estudiantes

Aunque la Universidad de Guadalajara (UdeG) muestra un apoyo público mediático, de manera oficial carece de un listado completo de las y los estudiantes desaparecidos ni de acciones precisas encaminadas a orientar a las familias.

Además, quedó inconcluso la generación de un protocolo de personas desaparecidas en la casa de estudios.

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Durante el conversatorio: “Pistas para un protocolo ante la desaparición de estudiantes” organizado por el Departamento de Historia del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la UdeG se hizo el pase de lista de los más de 30 estudiantes desaparecidos que forman parte de la universidad pública.

Investigadores y activistas proponen la urgencia de formalizar y generar un diagnóstico de búsqueda de estudiantes y generar un protocolo de prevención de desaparición de estudiantes y de la comunidad universitaria, además de hacer un ejercicio de memoria.

Uno de los ponentes del conversatorio, el investigador-periodista, Humberto Darwin Franco Migues, señaló que a pesar de que la universidad muestra interés público, de manera oficial no hay un listado de cada estudiante desaparecido o una acción determinada para realizar una búsqueda y orientación.

“Es algo que le ha costado mucho a esta universidad hacerlo a pesar de que ha mostrado un interés en el tema. Recientemente la FEU ha hecho este recuento también de los estudiantes desaparecidos, pero si uno se mete a la página de la FEU, se mete a la página de la universidad, no hay un listado público donde uno pueda saber quiénes son”.

Agregó: “Finalmente formamos parte de una universidad pública, que funciona gracias a los recursos de todas las personas, incluidas todas las personas que están buscando y que la universidad digamos les debe mucho, es decir, aquí prácticamente tendríamos como la posibilidad de apoyarles en un montón de áreas pensando solamente en este Centro Universitario o en algunos otros habría la posibilidad de poderlo hacer. Lo que ha faltado digamos a la universidad como le ha faltado a otras instituciones es primero preguntarle a las familias que necesiten, de qué manera la universidad les podría ser útil”.

Darwin Franco se refirió también al anuncio de primer diagnóstico universitario para conocer la dimensión de la desaparición de personas al interior de la UdeG: no se avanzó mucho y ahora que adelantaron las elecciones pues supongo que los intereses están más en otros lados, parte de ese protocolo era saber si las personas directivas de esta universidad, de carrera jefe de departamento tenían conocimiento o no de qué hacer en caso desaparición”.

Mientras que, la investigadora y responsable del programa de desaparición de personas del ITESO, Alejandra Cartagena López resalto la importancia de que las universidades asuman el compromiso y la responsabilidad de contar con un protocolo para prevenir la desaparición de personas y contar con mecanismos de actuación.

“Las universidades como espacios de formación también deben de asumir una responsabilidad activa en la protección y defensa de los Derechos Humanos,osea es fundamental que las instituciones implementen protocolos de actuación específicos ante los casos de desaparición, dichos protocolos no solo permiten una respuesta organizada y efectiva en situaciones de crisis sino que también reflejan el compromiso de las instituciones educativas con la protección de sus estudiantes, de la comunidad universitaria y el respeto de los Derechos Humanos, es decir como academia si nos toca estudiar, analizar la problemática,pero también nos toca llevar a cabo acciones”.

La también activista mencionó que es urgente contar con protocolos para prevenir la desaparición de estudiantes al señalar que resulta difícil encontrar una persona a las 72 horas o a las 12 horas, de ahí la urgencia de contar con protocolos de actuación en la universidad pública y universidades privadas de Jalisco.

En el conversatorio: “Pistas para un protocolo ante la desaparición de estudiantes” también estuvo la investigadora Alejandra del Rocío Guillén González, quién expuso ante las y los estudiantes las características de las personas desaparecidas y del modus operandi de cómo las organizaciones atraen a las personas en temas laborales y resultan que son reclutadas.

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Aunque la Universidad de Guadalajara (UdeG) muestra un apoyo público mediático, de manera oficial carece de un listado completo de las y los estudiantes desaparecidos ni de acciones precisas encaminadas a orientar a las familias.

Además, quedó inconcluso la generación de un protocolo de personas desaparecidas en la casa de estudios.

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Durante el conversatorio: “Pistas para un protocolo ante la desaparición de estudiantes” organizado por el Departamento de Historia del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la UdeG se hizo el pase de lista de los más de 30 estudiantes desaparecidos que forman parte de la universidad pública.

Investigadores y activistas proponen la urgencia de formalizar y generar un diagnóstico de búsqueda de estudiantes y generar un protocolo de prevención de desaparición de estudiantes y de la comunidad universitaria, además de hacer un ejercicio de memoria.

Uno de los ponentes del conversatorio, el investigador-periodista, Humberto Darwin Franco Migues, señaló que a pesar de que la universidad muestra interés público, de manera oficial no hay un listado de cada estudiante desaparecido o una acción determinada para realizar una búsqueda y orientación.

“Es algo que le ha costado mucho a esta universidad hacerlo a pesar de que ha mostrado un interés en el tema. Recientemente la FEU ha hecho este recuento también de los estudiantes desaparecidos, pero si uno se mete a la página de la FEU, se mete a la página de la universidad, no hay un listado público donde uno pueda saber quiénes son”.

Agregó: “Finalmente formamos parte de una universidad pública, que funciona gracias a los recursos de todas las personas, incluidas todas las personas que están buscando y que la universidad digamos les debe mucho, es decir, aquí prácticamente tendríamos como la posibilidad de apoyarles en un montón de áreas pensando solamente en este Centro Universitario o en algunos otros habría la posibilidad de poderlo hacer. Lo que ha faltado digamos a la universidad como le ha faltado a otras instituciones es primero preguntarle a las familias que necesiten, de qué manera la universidad les podría ser útil”.

Darwin Franco se refirió también al anuncio de primer diagnóstico universitario para conocer la dimensión de la desaparición de personas al interior de la UdeG: no se avanzó mucho y ahora que adelantaron las elecciones pues supongo que los intereses están más en otros lados, parte de ese protocolo era saber si las personas directivas de esta universidad, de carrera jefe de departamento tenían conocimiento o no de qué hacer en caso desaparición”.

Mientras que, la investigadora y responsable del programa de desaparición de personas del ITESO, Alejandra Cartagena López resalto la importancia de que las universidades asuman el compromiso y la responsabilidad de contar con un protocolo para prevenir la desaparición de personas y contar con mecanismos de actuación.

“Las universidades como espacios de formación también deben de asumir una responsabilidad activa en la protección y defensa de los Derechos Humanos,osea es fundamental que las instituciones implementen protocolos de actuación específicos ante los casos de desaparición, dichos protocolos no solo permiten una respuesta organizada y efectiva en situaciones de crisis sino que también reflejan el compromiso de las instituciones educativas con la protección de sus estudiantes, de la comunidad universitaria y el respeto de los Derechos Humanos, es decir como academia si nos toca estudiar, analizar la problemática,pero también nos toca llevar a cabo acciones”.

La también activista mencionó que es urgente contar con protocolos para prevenir la desaparición de estudiantes al señalar que resulta difícil encontrar una persona a las 72 horas o a las 12 horas, de ahí la urgencia de contar con protocolos de actuación en la universidad pública y universidades privadas de Jalisco.

En el conversatorio: “Pistas para un protocolo ante la desaparición de estudiantes” también estuvo la investigadora Alejandra del Rocío Guillén González, quién expuso ante las y los estudiantes las características de las personas desaparecidas y del modus operandi de cómo las organizaciones atraen a las personas en temas laborales y resultan que son reclutadas.

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