El Seguro Popular no desaparecerá, habrá una reestructuración para alinear el Sistema de Salud para alcanzar la cobertura sanitaria universal, sostuvo el director médico nacional del Instituto de Seguridad Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Ramiro López Elizalde de visita por Guadalajara.
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Actualmente, dijo, se busca transparentar los recursos del Seguro Popular al señalar que era la “caja chica de muchos gobernadores, un sistema poco auditable porque se era juez y parte (…) en vez de desaparecer esa oportunidad que tienen los mexicanos a la salud queremos extenderla que no solamente sea en algunos conceptos (de atención médica)”.
Señaló que los recursos del Seguro Popular pasan al IMSS-Bienestar, como primer modelo para universalización de los servicios a la salud.
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En entrevista, López Elizalde mencionó que una de las debilidades del país es la fragmentación del sistema sanitario lo que ocasiona la duplicidad de las inversiones al mencionar que en hay 450 hospitales en obra negra y 80% de los equipos médicos del ISSSTE, del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS), Secretaría de Salud y en hospitales de Petróleos Mexicanos (Pemex) son obsoletos y deben renovarse, a lo que atribuyó el crecimiento del gasto en la subrogación de servicios con terceros.
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De acuerdo al último informe financiero, el director médico del ISSSTE informó que los fondos de salud y prestaciones sociales presentan un déficit de 12 mil millones de pesos, y siete mil millones de pesos más en sentencias en pensiones y juicios laborales.
Actualmente dijo que se hace una valoración en la infraestructura de las instituciones de salud en cada entidad federativa con el objetivo de establecer una planeación para enfocar dónde será la nueva infraestructura de salud.
