Emotiva y en medio de las lágrimas y aplausos así fue la despedida del presidente del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), Guillermo Amado Alcaraz Cross, quien cumplió el plazo para el que fue designado y de manera provisional asume el cargo la consejera Brenda Serafin, con lo que se convierte en la primera presidenta del organismo.
Ante la falta de definición de la elección de quién será responsable de la presidencia del Instituto Electoral por parte de los consejeros del Instituto Nacional Electoral, se decidió por unanimidad que fuera Brenda Serafin la que dirija los destinos del Instituto durante octubre o en su defecto hasta que el proceso de designación del nuevo titular se concluya.
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Así entre aplausos y una que otra lágrima Guillermo Alcaraz agradeció a su familia todo el apoyo, a sus colaboradores, a los representantes de los partidos políticos y los tres poderes de gobierno todo el apoyo dado en estos siete años de presidencia.
Al concluir sus dos mil 555 días se queda pendiente una elección extraordinaria en Jilotlán de los Dolores, una consulta popular, la definición del presupuesto de egresos y la reforma para el financiamiento público de los partidos políticos.
Le tocó encabezar dos procesos de elección a gobernador, lo cual no había sucedido, una reforma constitucional, el cambio de tres integrantes del Consejo General, ver la disolución y conformación de varios partidos, entre otros temas.
La parte emotiva fue cuando señaló que “durante estos 21 años murió mi papá, espero que lo haya hecho satisfecho de su hijo, por todo esto le agradezco a mi familia, mis padres, mi hermano, mi esposa y mis hijos por el apoyo y la resistencia mostrada. A los aliados por su compromiso cívico del Estado”.
Alcaraz Cross señaló que este día concluye un largo sendero de 21 años por la democracia y se va convencido de haber cultivado más amigos que enemigos y “no es un adiós, es un hasta pronto”, por el momento no puede integrarse a ningún área de administración pública ni partidos políticos, ni asociaciones durante dos años ya que la ley se lo impide.
Tras lo cual todos los integrantes del consejo general le expresaron su agradecimiento por el apoyo y el compromiso que mostró al frente del organismo, al defender ante todo al instituto, pero sobre todo por la parte humana y conocimiento que mostró ante todos, con un liderazgo que no se había visto y que consolidó al organismo como un ejemplo a seguir en los procesos electorales al innovar con la urna electrónica.