Debido al aislamiento al que tapatíos se tienen que someter, como medida preventiva por el coronavirus, la doctora Beatriz Corona Figueroa, especialista de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), llamó a la ciudadanía a no perder contacto con seres queridos y llevar una vida ordenada, para no caer en ansiedad o depresión.
Si bien en tiempos actuales el encierro y las constantes noticias negativas que día a día se comparten, en especial en redes sociales, pueden generar afecciones en las personas, la también psicóloga y terapéutica pugnó por no dejar de lado la esperanza y el positivismo.
“Esta situación puede generar sentimiento que son extraños en nosotros, como pensamientos negativos o de impacto o shock y de duelo. Es el momento de cumplir metas que disponíamos por no tener tiempo de estar en casa. Es momento de aprender nuevos hábitos que podrán cambiar nuestra vida”.
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En vista de cómo es que avanzó la contingencia por coronavirus en todo el mundo, calificó como normal el que se generen sentimientos de duelo pero por perder la libertad, de ahí el llamado a la tranquilidad y que se observe con otros ojos el aislamiento y las demás medidas que autoridades han recomendado, en un afán de evitar la propagación del virus.
Señaló que una vez que se acepte lo que ocurre, se podrán tomar mejores decisiones y enfocarse en lo que se puede hacer como quedarse en casa, ser conscientes de las compras y no generar adquisiciones de pánico, ser planificadores y establecer una serie de conductas más positivas con el entorno y otras personas.
“Son pasos que podemos dar para una verdadera aceptación de la situación, para que, cuando la pandemia terminé, nosotros podamos salir más fuertes y descubrir que aprendimos algo. Esta pandemia podría ayudarnos a fortalecer nuestros lazos con las personas que amamos”.
Para poder llevar en armonía estas medidas de aislamiento, la experta llamó a establecer un orden que impliquen cuatro ámbitos fundamentales como el físico, intelectual, emocional y espiritual.
“No andemos en pijama todo el día, nos podemos arreglar como si fuéramos a trabajar y establecernos horarios; en lo emocional podría ayudarnos abrazar a nuestras familias y hablar; en lo intelectual tomar cursos en línea, leer o aprender un idioma; mientras que en la parte espiritual, puede ser un momento importante para la introspección o la reflexión”, añadió.
