Con una lona informando que la “entrada al templo es por 16 de septiembre” y una flecha que era color rojo, pero por el sol ya está prácticamente borrada, se informa que el templo de San Francisco en el centro tapatío, sigue cerrado.
El motivo solo lo conocen quienes por ahí transitan con frecuencia, pues tanto turistas, como los mismos tapatíos que poco van al Centro de la ciudad, no saben que sufrió daños a causa de las obras de la Línea 3 del Tren Ligero y eso obligó a cerrarlo.
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La gran puerta de madera que adornaba su entrada principal, ahora funciona para sesiones fotográficas, pero del templo que comparte andador con el de Aranzazú y lo que hay dentro de él, ya pocos se acuerdan.
Samatha es una joven que colabora con una empresa de telefonía y tiene asignada esa zona para invitar a los paseantes a cambiar de compañía telefónica. Ella desde hace tiempo sabe que el templo de San Francisco, al igual que al menos otra docena de edificios del centro tapatío, sufrieron daños por la construcción de la Línea 3.
Ignacio, un hombre que toma el camión por la calle Prisciliano Sánchez rumbo a Tlaquepaque, también conoce el motivo por el cual cerró sus puertas el templo de San Francisco, pero en realidad, quienes por ahí caminan o incluso quienes usan como referencia “los dos templos”, no saben por qué ya no abre sus puertas.
Lo que es un hecho, es que el inmueble, ubicado por la calle Héroes a su cruce con 16 de Septiembre, solo funciona como oficina para ofrecer informes respecto a celebraciones eucarísticas en el templo de Aranzazú y a quienes acuden preguntando si es posible oficiar una misa en San Francisco, se les indica que no.
Sobre el tema, Armando Brenez Moreno, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Jalisco (CICEJ), recordó que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) tiene el compromiso “de dejar funcionando todo, tal como estaba” y si el templo está cerrado “es por seguridad, pero se tiene que hacer un diseño de reforzamiento estructural, porque no pueden estar apuntalados ya para siempre, se tiene que dar el reforzamiento adecuado y que se quite el apuntalamiento que da mala imagen, pero si no lo han quitado es porque se necesita todavía”.