Algunos imprevistos que se tuvieron durante el desarrollo del Macrosimulacro de desalojo por temblor en las instalaciones de la Rectoría de la Universidad de Guadalajara hicieron que el tiempo que se empleó este año fue de ocho minutos y medio, es decir casi dos minutos más que el año pasado reconoció el titular de la Unidad de Protección Civil interna Diego Ruiz.
En el ejercicio que inició en punto de las 10 de la mañana al sonar las alarmas, participaron más de mil 200 personas entre trabajadores y usuarios de algunos servicios que se estaban desarrollando en ese momento en las instalaciones; el procedimiento fue bajar por las escaleras y concentrarse en el punto señalado con anterioridad y en ejercicios previos.
Mientras que el rector de la UdeG, Miguel Ángel Navarro, consideró este ejercicio como bueno para poder ir tomando conciencia de lo que implica tener que desalojar las instalaciones en caso de un sismo real.