Sociedad Mexicana de Cardiología y la Fundación Mexicana del Corazón, da a conocer sus acciones

Los ponentes se pronunciaron porque los medicamentos estén accesibles en el personal médico de primer contacto

Isaura López | El Occidental

  · domingo 29 de noviembre de 2020

La obesidad aumenta problemas de colesterol, aumenta la presión arterial y riesgo cardiovascular.

Reconstruir los sistemas de salud para mejorar la calidad de vida de los pacientes, y que los profesionales de la salud deben seguir adquiriendo más conocimientos sobre las enfermedades cardiovasculares durante la pandemia fueron parte de las conclusiones de la IV Cumbre Latinoamericana del Colesterol. Pacientes de Corazón A.C. (PACO).


La Sociedad Mexicana de Cardiología y la Fundación Mexicana del Corazón, dieron a conocer sus acciones y estrategias para que los sistemas del sector salud de los países de América Latina evolucionen frente a la actual crisis de salud.

Las actividades van encaminadas a que los profesionales de la salud, los gobiernos, los pacientes y familiares se sensibilicen para un mejor control del colesterol de toda la población para evitar complicaciones de padecimientos cardiovasculares.

El médico adscrito de la Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas del Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán, Carlos Alberto Aguilar Salinas, expresó que las familias sufren el impacto económico y social que representa los padecimientos como son la cardiopatía isquémica, la diabetes y la enfermedad renal crónica, principales causas principales de muerte en México.

Comentó que el 17.7% de la población mexicana tiene una concentración alta de triglicéridos y colesterol que ponen en riesgo de tener enfermedades cardiovasculares, además de las genéticas de la población que explican la alta prevalencia de colesterol.


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El presidente de la Asociación PACO A.C., Carlos Castro, resaltó que lo más importante de esta cumbre fue la posibilidad de reunirse en el nuevo formato virtual paran seguir comunicando los temas de salud fundamentales en pro de los pacientes, pero es especifico tratar el tema del colesterol.

Los ponentes se pronunciaron porque los medicamentos estén accesibles en el personal médico de primer contacto, por lo que deben estar capacitados y tener facultades para proscribir los fármacos requeridos para los enfermos.

A pesar de los bombardeos mediáticos y publicitarios de los alimentos de baja calidad nutrimental. Cada uno de los voceros de cada institución de salud de América Latina concordaron en que se debe de transmitir la información correcta a la población en cuanto a los alimentos saludables.

Con respecto a las acciones de cada gobierno; la IV Cumbre Latinoamérica del Colesterol expuso que una política sin un anclaje en lo territorial no funciona. Se necesita una interacción integral con los profesionales de la salud y las autoridades gubernamentales para transformar la calidad de vida de las personas con la perspectiva de una mayor incidencia en hábitos saludables.


Durante las ponencias se resaltó el trabajo de las Asociaciones, pues tratan de buscar las acciones necesarias para cambiar las perspectivas en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. Una de ellas es incidir en las políticas públicas y en los programas de reactivación física para la población en general.

La IV Cumbre Latinoamérica del Colesterol convocó a expertos nacionales e internacionales, pacientes y familias de América Latina, para abrir el diálogo en la región sobre las acciones para contrarrestar el “colesterol malo”.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que para 2030, cerca de 23.6 millones de personas morirán por alguna enfermedad cardiovascular (ECV).