Este año podría cerrar con cerca de 34 mil homicidios dolosos en el país, prácticamente la misma cifra con la que terminó el gobierno de Enrique Peña Nieto, que en su periodo, fue histórico el nivel de violencia, lo que refleja que se ha estancado en el actual gobierno, indicó Eduardo Guerrero, consultor en Seguridad Pública.
"El problema de fondo que hasta ahora ha impedido una pacificación duradera del país es político. Los grupos criminales incurren en todo tipo de excesos porque saben que operan al amparo de las redes de protección que han construido al interior de las propias instituciones del Estado".
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Expuso que la Guardia Nacional este año ejerció 37 mil millones de pesos y pasará en 2022 a 63 mil millones de pesos, es decir, un 70% más, además de que la mayoría de gobernadores entrantes son morenistas y algunos de los opositores, entre ellos Enrique Alfaro, en Jalisco, ha mostrado "mayor interés por colaborar con Palacio Nacional" y eso podría favorecer las políticas de paz promovidas por el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
"Se podría lograr a partir del 2022 una disminución importante del homicidio, si la Guardia Nacional se enfocara en la pacificación de cinco o seis de los estados en los que se pueda establecer una buena relación de trabajo y que actualmente se encuentran en crisis: Baja California, Chihuahua, Michoacán, Sonora y Zacatecas, serían candidatos lógicos".
Esto, porque el trimestre pasado dichas entidades concentraron el 40% de los homicidios vinculados con el crimen organizado en el país, además de que sugirió, para cada Estado, la identificación y desarticulación de las células que generan violencia, como sucedió en Guerrero en 2019.
Esto, durante su participación en la mesa denominada “El futuro del estado”, que se realiza en la Feria Internacional del Libro (FIL) Guadalajara.