De las más de 22 mil hectáreas de aguacate Hass jalisciense certificadas, por el momento sólo ocho mil 420 son elegibles para exportar a Estados Unidos desde este jueves y se espera que poco a poco se incremente.
Durante el banderazo de salida del primer embarque de 220 toneladas de este producto, se espera que llegue en 24 horas al país vecino del Norte y se da tras 25 años de lucha, con lo que se llega a un día histórico para este sector.
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El secretario de Agricultura, Víctor Manuel Villalobos Arámbula, mencionó que es un evento trascendental y se da un paso importante para los productores de Jalisco al mandarse 220 toneladas de 608 huertos.
Esta exportación es posible, ya que empacadores y productores implementaron medidas fitosanitarias para garantizar a los consumidores y socios comerciales que el aguacate está libre de plagas y del gusano barrenador.
Mencionó que, en Jalisco, dicha industria genera más de 12 mil empleos directos y más de 22 mil indirectos en 15 municipios en donde están las más de 22 mil hectáreas de siembra libres de plaga y con huertas altamente certificadas.
En cuanto a cifras, en el 2021 Jalisco envió al extranjero 113 mil toneladas a más de 25 países -principalmente- Canadá, Japón y España, pero desde hoy se suma a Estados Unidos, con lo que concluye la historia iniciada en julio de 1997.
Detalló que en 25 años la producción de aguacate se multiplicó, ya que en 1996 se producían 796 mil toneladas y el año pasado se superaron las dos millones 400 mil toneladas y se consume en 51 países del mundo, con un valor de tres mil 104 millones de dólares, sólo a Estados Unidos las ventas fueron de más de dos mil millones de dólares.
El Gobernador, Enrique Alfaro Ramírez, dijo que es un día de fiesta con el que se concluye un trabajo muy largo, “es importante recordar que en el 2017 éramos testigos de una historia difícil de explicar, en donde se anunciaba la entrada del aguacate de Jalisco a Estados Unidos y de repente no funcionó”.
Explicó que era absurdo hablar del gigante agroalimentario de México, sino se fue capaz de atender dos agendas centrales que son parte del desafío del futuro del aguacate.
La primera es la agenda ambiental, tal como se hizo con el agave para evitar la deforestación de bosques y destinarlo a este fin; se busca que sea una obligación de todo el sector.
Reconoció que no hubo conflicto de intereses con los productores de Michoacán, sino todo lo contrario, se tuvo coordinación y apoyo mutuo.
El segundo compromiso es el de una agenda social en donde se pretende que las personas que laboran en un campo considerado altamente productivo no tengan un alto grado de marginación y, es por eso, que se impulsará todo un sistema de guarderías para las madres que trabajan en este sector, la idea es iniciar por lo menos con 50 guarderías.
Se platicó con el gobernador de Michoacán para garantizar un sistema adecuado de seguridad, a fin de que el producto circule por ambas entidades sin ningún problema y llegue a su destino.
Francisco Javier Trujillo, director de Senacica, dio a conocer que espera sea el inicio de por lo menos 25 años de envíos de manera ininterrumpida con un esquema de trazabilidad, pero en especial cuidar todos los procesos de sanidad, es decir, evitar también la presencia del gusano barrenador en los más de dos mil 200 huertos que conforman las ocho mil 400 hectáreas desde donde ya se puede exportar.
José Luis Gallardo Anguiano, presidente de los aguacateros de México, señaló que por la falta de esa trazabilidad y por cuestiones del clima se dejó de exportar a Estados Unidos 200 mil toneladas y sólo se llegó a las 915 mil, además desde hace poco más de seis años este producto tiene presencia en el Super Bowl y eso le ha dado gran proyección.
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