Al reconocer que en México los que menos ganan son los productores del campo, pues la mayoría de ganancias se quedan con los intermediarios, Roberto De Alba Macías, presidente del Consejo Agroalimentario de Jalisco solicitó a las autoridades de los diferentes niveles de gobierno mayor regulación al respecto.
“No es justo que quien produce sea el que menos gane, son los intermediarios del lado de México y los brokers del lado de Estados Unidos quienes se llevan más de la mitad de las utilidades en la comercialización”.
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Todo esto durante el Primer Encuentro Agroalimentario organizado por el Consejo Agroalimentario de Jalisco, que contó con la presencia del titular de la Secretaría de Desarrollo Rural (Sader) federal, Víctor Villalobos Arámbula.
En la reunión firmaron un convenio que incluye también a la Cámara de la Industria Alimenticia de Jalisco, a fin de sumar voluntades en beneficio de agricultores, ganaderos, empresarios e industriales del campo jalisciense.
“Con la firma de este acuerdo y el respaldo de la Secretaría de Agricultura Federal vamos a liberar a Jalisco del coyotaje, para que las familias productoras ganen más” agregó De Alba Macías.
De su parte, Villalobos Arámbula hizo un llamado a la productividad, competitividad y transferencia de tecnología para producir con una mayor sustentabilidad y cuidado del medio ambiente.
Durante el encuentro presentaron el Programa de Desarrollo de Proveedores en el Estado, con el cual pretenden reorganizar al campo jalisciense, que es líder a nivel nacional en la producción de alimentos.
La idea, explicaron, es vincularlos e incorporarlos a los esquemas de agricultura por contrato y proveeduría directa de insumos productos, sub productos y servicios con las empresas e industrias afiliadas a la Cámara de la Industria Alimenticia de Jalisco.
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Dieron a conocer además que en breve se presentará una iniciativa para la creación de la Ley de Asociaciones Agroalimentarias, con la que pretenden reorganizar al campo jalisciense en figuras asociativas municipales, regionales y estatales, por rama de producción o cultivo específico, lo que facilitaría el acceso a crédito, financiamiento, tecnología y apoyos gubernamentales.