La labor humanista de la Universidad de Guadalajara dentro de la pandemia de Covid-19 es innegable y forma parte de su esencia, como lo advierte el rector general Ricardo Villanueva Lomelí, quien dijo: “El conocimiento cobra sentido en esta Universidad cuando se pone al servicio de la sociedad”, al recibir el premio de Socio Distinguido 2020, de manos del Consejo Directivo de la American Chamber México.
El consejero de American Chamber, Adalberto Ortega Solís, explicó que cada año este organismo entrega tres galardones, y el Consejo Directivo deliberó y determinó que la Universidad de Guadalajara es merecedora de uno de estos reconocimientos.
Te recomendamos:
Luego refrendó: “En esta etapa tan especial que se vive en el mundo, vimos la reacción tan extraordinaria de nuestra Universidad. Ante esta actitud y preocupación, el Consejo Directivo de la American Chamber entrega este galardón a la UdeG. Esta Universidad es la que nos ha formado y lo que aquí aprendimos es no sólo a pensar y a trabajar, sino también a actuar en beneficio de la comunidad”.
El espíritu universitario, de la Universidad del pueblo, resaltó, dedicada a la educación, investigación y la cultura, hoy demuestra el potencial de lo que se logra con la entrega de su comunidad.
Por otro lado, el Rector General de la UdeG, doctor Ricardo Villanueva Lomelí, dijo que este premio es merecido para la comunidad universitaria, que ha demostrado una vez más el potencial del conocimiento y de las instituciones de educación pública cuando se ponen al servicio de la gente.
“Gracias por este reconocimiento en nombre de la comunidad universitaria, que se ha mantenido durante ocho meses luchando contra esta pandemia; de la comunidad médica del Hospital Civil, institución hermana, que es el único hospital que no ha tenido en el país un solo fallecimiento de sus trabajadores. Tenemos a la mejor universidad del país, y debemos de sentirnos orgullosos de esta universidad con una historia de 200 años y que en los últimos 30 años dejó de ser solo una universidad de docencia para convertirse en una universidad de investigación y difusión de la cultura. La universidad dejó de ser un profesor, un salón y un baño”, declaró Villanueva Lomelí.
Solo un dato: Jalisco podía sólo hacer 90 pruebas por día, y gracias a que la UdeG aportó los equipos de PCR de sus investigadores hay capacidad de 840 pruebas diarias.
“Pero las universidades viven un momento complejo a nivel presupuestal. Llevamos tres años que no logramos crecer, todas las bolsas solidarias desaparecieron; de mil 400 millones que la UdeG recibió en 2015, el siguiente año vamos a tener 38 millones. Este tipo de reconocimientos estimulan mucho para ser una Universidad que siga apostando por la investigación, la ciencia y la tecnología. Porque el conocimiento cobra sentido en esta universidad cuando se pone al servicio de la sociedad”, subrayó Villanueva Lomelí.