Media hora antes de lo previsto y de manera breve, en el ayuntamiento de Guadalajara se rindió homenaje de cuerpo presente al ex gobernador de Jalisco Guillermo Cosío Vidaurri, quien falleció el miércoles por la mañana.
Recalcando la trayectoria política que trajo avances en materia de movilidad, el alcalde de Guadalajara, Ismael del Toro Castro habló sobre su legado al recordarlo como un tapatío promotor y protagonista del desarrollo político y social de Guadalajara, como presidente municipal, y en Jalisco cuando fue gobernador.
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"Su amplia trayectoria hace de don Guillermo Cosío Vidaurri, un servidor público que siempre miró por ser incluyente al haber sido diputado federal, secretario general de gobierno y director del metro de la Ciudad de México, así como embajador de nuestro país en Guatemala. Desde joven inició en la política formando en el tiempo parte de una generación cuyas aportaciones resultaron fundamentales para el devenir político estatal".
Al sumarse a la pena de la familia por la pérdida, del Toro Castro destacó que además de su legado político, Cosío Vidaurri se caracterizó por ser una persona sencilla, sensible y con una apertura permanente.
"Como gobernador de Jalisco creó el CODE, el Patronato de las Fiestas de Octubre, expidiendo también el decreto que le dio vida al parque Solidaridad, además de impulsar la consolidación y crecimiento del Tren Ligero de nuestra ciudad. Un sistema de transporte urbano que cumplió 30 años de existencia, habiendo transportado a mil 693 millones de usuarios y cuyos trenes han recorrido 143 millones de kilómetros", agregó.
Por su parte, José Guillermo Cosío Gaona, uno de sus hijos, habló del amor y orgullo que siempre sintió por Guadalajara por todo lo que logró hacer en la ciudad en cuanto al mejoramiento de servicios públicos municipales, no por él, sino por el gran equipo de trabajo que lo apoyó.
"Durante su administración pudiéramos hablar de grandes obras y de grandes situaciones que se crearon como vivienda, unidades deportivas, mercados. Estamos hablando de una época en la que apenas o la mayoría de las personas que estaban en la política pues eran mayores, y él a sus 42 años era considerado un joven que apenas empezaba en la política, aunque ya tenía su carrera. Siempre estuvo orgulloso de Guadalajara, de la obra que se realizó y su obra todavía vive, todavía se nota y todavía es un ícono en las administraciones posteriores".
