Si desplegar los 6 mil elementos de la Guardia Nacional en las Fronteras de México es para disminuir los delitos o detener a los criminales en estas franjas tan vulnerables del territorio mexicano, es aplaudible; pero, si será para controlar a los inmigrantes centroamericanos no se puede apoyar esta decisión, opinó el investigador de la UdeG, Alejandro Canales Herón.

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“Si será para controlar migrantes, la Guardia Nacional no está para eso; para eso existe el Instituto de Migración, la GN puede apoyar pero atacando el crimen, los delitos, la inseguridad, no atacar al migrante, sino al delincuente” mencionó el académico.

Los cuestionamientos al canciller mexicano, Marcelo Ebrard, por haber cedido a los intereses de Estados Unidos, se alimentan por la indefinición del gobierno en explicar claramente qué hará la GN en la frontera, cuáles serán sus funciones y entonces poder exigir cuentas.

“¡En eso el gobierno no ha sido claro! Debe ser claro y preciso, porque todo queda en el aire y a la interpretación ” externó.

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