El día más de un centenar de personas son diagnosticadas con algún tipo de cáncer en Jalisco, principalmente de mama, cérvix, próstata, colon, endometrio, ovarios, tiroides, melanoma, recto y linfomas, mientras que 17 más mueren por las complicaciones.
Los tumores malignos representan la cuarta causa de muerte entre la población. De 2019 al 2022 se expidieron más 24 mil 900 certificados de defunción tanto del Registro Civil como de los Servicios médicos Forenses de la entidad.
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Con los avances de la medicina en oncología se puede revertir la fórmula de cáncer es igual a muerte por tener más información, diagnóstico y tratamiento oportuno, aseguran especialistas del Hospital Civil de Guadalajara (HCG) y del Instituto Jalisciense de Cancerología (IJC) y de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ).
Ambas instituciones son de alta especialidad, atienden al mayor número de personas sin seguridad social. Detectar a tiempo el cáncer aumenta la expectativa de vida, sin embargo los factores de riesgo como la alimentación alta en calorías, sedentarismo, sobrepeso, obesidad, tabaquismo, alcohol y la cuestión económica contribuyen a que se a un padecimiento catastrófico.
Cada ve z son más las personas diagnosticadas con algún tipo de cáncer. En ambas instituciones médicas acuden más pacientes con tumor maligno de mama, de cérvix y de próstata; cada una tiene sus propias estadísticas y seguimiento.
En el consultorio de cancerología del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara “Fray Antonio Alcalde” al día acuden medio centenar de pacientes, esto es que hay tres veces más consultas que en el 2019. Al ser un hospital de concentración cada semana son diagnosticadas cuatro pacientes con cáncer de mama; cada tercer día cuatro con cáncer de próstata; cada 72 horas, tres de colon recto y al mes cerca de diez casos son por cáncer de pulmón.
Otro tipo de cáncer frecuentes mencionó el jefe del Servicio de Oncología, Juan Carlos Vázquez Limón son de vejiga, cabeza, cuello, tiroides, boca, faringe, de las cuerdas vocales y del estómago.
La detección temprana, comentó amplía la esperanza de vida y disminuye la mortalidad de realizarse los estudios correspondientes para identificar a tiempo algún tipo de tumor: para cáncer de mama es una mamografía y ultrasonido a partir de los 40 años; para el cáncer de cérvix son los exámenes de papanicolaou y c olposcopia; para el cáncer de colon es el estudio de tomografía, pruebas en heces, sangre y colonoscopia.
Advierte: “En los tumores donde no tenemos métodos de detección en general se asocia a más mortalidad como cáncer de ovario, de esófago, de estómago”.
Hay cánceres más agresivos que otros como los del estómago, independientemente en qué etapa pueda encontrar uno o tres el riesgo de morir es alto en comparación con el de mama.
“En una etapa uno la probabilidad de estar sin enfermedad en 5 años e s mayor al 90 por ciento por el seguimiento que se da en este tiempo a la paciente. Mientras que en etapa cuatro la probabilidad de vida baja a 15 por ciento a pesar del tratamiento innovador y nuevas moléculas”.
En el cáncer de próstata es importante que a partir de la quinta década de la vida acudir con un urólogo para realizar los estudios de contacto rectal y antígeno prostático. El tratamiento es a través de un bloqueo hormonal contrario al p asado que era una cirugía testicular.
“En la actualidad tenemos medicamentos que se inyectan subcutáneos que hacen que los testículos no producen testosterona, de tal manera que para los pacientes es menos traumático y la calidad de vida y psicológica al no retirar los testículos es algo bueno”.