Realizar campañas con propuestas de altura, sin ataques a los adversarios y sobre todo sin difundir noticias falsas que confundan a los ciudadanos es la petición que hizo el representante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), Juan Alcalá a todas las fuerzas políticas e independientes.

“Tenemos ciudadanos que merecen mejor política que ya están informados, muy activos y que queremos que sea proactiva en términos de política, nuestra responsabilidad es elevar el debate político, que el nivel de debate no sea el chisme, la calumnia, el ataque, que se dé con base en la cusa, en la idea y sobre todo en la construcción de un nuevo Jalisco que mantenga y fortalezca el liderazgo que hemos tenido como estado por muchos años”, aseguró.

Dijo que en el PRI están convencidos, al igual que el resto de los partidos, en darle el juego a los ciudadanos y en donde espera que los electores les abran las puertas para poder hacerles llegar sus propuestas. Por lo que espera se desarrolle un proceso “sano, constructivo” y en apego a la norma.

Explicó que en su partido creen en las instituciones y que los ciudadanos organizados pueden llevar a mejor puerto los proyectos, pero sobre todo debe prevalecer el respeto a las normas o leyes durante la competencia electoral que inició el primer minuto pasado viernes.

Esto no quiere decir que la competencia sea desleal o fuera de los valores, somos un partido en competencia y como tal vamos a seguir trabajando para crear condiciones y campañas cercanas a los ciudadanos, somos un partido de causas y estaremos contrastando propuestas en el mejor de los sentidos, plataformas y dando a conocer lo que pensamos como partido y lo que piensan los candidatos

Juan Alcalá dijo que el respeto es lo que debe de prevalecer por encima de la competencia ya que al mantener el respeto entre los aspirantes y los partidos se podrá llegar a un elección sana y en donde los ciudadanos saldrán a elegir a sus autoridades, así como publicad y propaganda apegada a las normas que los propios partidos han establecido.