A 11 años del anunció del Operativo Conjunto Michoacán,cuando se desplegaron fuerzas armadas en la guerra contra elnarcotráfico, el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval,manifestó su postura de ser claro en la Ley de Seguridad Interiory puntualizar una fecha máxima de la presencia del Ejército enlas calles, en tanto exigir a los gobernadores consolidar policíasestatales civiles depuradas y más fuertes, que garanticen laseguridad de sus ciudadanos.
En la junta de coordinación política del Senado de laRepública, Sandoval Díaz expresó que en este momento esindispensable se queden las Fuerzas Armadas (FF. AA.) en las callesde las entidades federativas para hacer frente a un lastre decrimen organizado y cuerpos de seguridad incapaces de darlucha.
“Tengo claro que de momento es imprescindible una estrategiaconjunta de todos los órdenes de Gobierno en la que la presenciadel Ejercito Mexicano y la Marina Armada de México estéclaramente delimitada para tender exclusivamente las amenazas a laseguridad interior”.
Pero reconoció que actualmente existe un vacío legal quegenera incertidumbre y abre la puerta a la violación de losderechos humanos; “a los gobiernos estatales les da la opción deevadir su responsabilidad de brindar seguridad con sus fuerzasciviles, a los militares les genera angustia pues camina a ciegashaciendo frente a una batalla en la que ellos no pidieron estar,mientras a la sociedad tampoco le brindan certeza respecto dequiénes están al mando y asumen su responsabilidad deseguridad”, dijo Sandoval Díaz.
De ahí que desde hace 10 años algunos estados del país handejado de lado su responsabilidad de otorgar seguridad pública,endilgándola a las FF. AA., “ello explica por qué en muchasentidades son militares quienes cumplen las labores de policía deproximidad, preventiva y por absurdo que parezca hasta de tránsitoy vialidad, en el marco del debate debe quedar precisado ningunaley puede eximir a ejecutivos locales de su responsabilidad degarantizar la seguridad a partir de la depuración constante ypermanente de las fuerzas de seguridad civil”, lo que, dijo, esinaceptable.
Hizo un llamado a legisladores a retomar la discusión de lapropuesta del Mando Único con un respaldo normativo paraconsolidar instituciones policiales más fuertes y menosdispersas.
“Estimo conveniente alzar la voz para que luego de desahogadala discusión respecto a la Ley de Seguridad Interior dé inicio elnecesario debate a la legalización de algunas sustancias, esimprescindible para llevar a cabo este debate sin tabúes”,manifestó Aristóteles Sandoval, pues reconoció que lo que mata alos jóvenes es la violencia y no el consumo.
“Una Ley de Seguridad Interior disipará la bruma en el actuarcotidiano de nuestras Fuerzas Armadas en la lucha emprendida hacemás de una década, una lucha heredada que, tengo que decirlo,tiene que revisar si abordarse de manera distinta, porque no setrata solamente del uso de la fuerza sino un modelo de seguridadintegral que nos permita atacar las causas y no sólo losefectos” agregó.
Además, mencionó que la presencia de FF. AA. en zonas urbanascausa un efecto contrario al de seguridad, pues generapreocupación y zozobra entre la ciudadanía.