Aunque es un programa que tiene buenas intenciones, lo cierto es que el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), que impulsará el Gobierno federal, está muy limitado y en realidad será un tanto insuficiente, manifestó Antonio Ruiz Porras, coordinador del doctorado de Estudios Económicos, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara.
En rueda de prensa para dar a conocer los pros y los contras del PACIC, académicos expertos en el tema hablaron sobre lo que representará mencionado paquete para la población. En el caso del especialista de la UdeG, este mencionó que una de las principales limitaciones es que se trata de un programa donde las estrategias de producción y reducción de precios se basan en el apoyo de grandes empresas.
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"Hay que recordar que en México más o menos el 52 por ciento de las personas dependen del pequeño comercio, y el pequeño comercio fue excluido de este paquete, entonces, pues esto implica que el impacto de la política de reducción de precios pues no va a ser generalizado para la población, por una parte".
Otro problema, señaló que es que se depende en buena medida del comercio exterior, por lo que algunos productos como el gas LP, la electricidad o la gasolina están fuera del control de la política económica nacional, ya que estos se importan.
Con respecto a la estrategia de producción enfatizó que será un tanto costosa y que además excluirá a los consumidores. Además, dijo que no se tiene que olvidar el hecho de que se está en periodo de sequía, por lo que en realidad no se puede hablar de un incremento en la producción de granos y otros bienes agrícolas -al regalar fertilizantes-, ya que en gran medida esto depende de qué tanta agua se tenga para esto.
"Sí preocupa un poco porque lo que veo es que el programa aunque tiene buenas intenciones, lo veo muy limitado por condiciones climatológicas, lo veo limitado por cuestiones internacionales, lo veo muy limitado porque hay cierta exclusión de agentes económicos que son muy importantes, y eventualmente también es un programa que no está centrado en promover la competitividad".
Por ello apuntó que en lo general se puede hablar del PACIC como una estrategia de corto plazo que tampoco se puede prolongar como tal, pues se corre el riesgo de generar problemas con inflación simultánea y estancamiento económico.
Por otro lado, y a decir de Moisés Alejandro Alarcón Osuna, coordinador de la licenciatura en Economía, los 330 mil millones de pesos que se van a destinar para estabilizar los precios de las gasolinas y la electricidad bien se podrían aplicar mejor a otro tipo de programas, con apoyos directos a las personas que tienen problemas con la inflación.