A casi dos semanas de iniciar oficialmente el ciclo escolar 2022-2023, los padres de familia ya recorren las papelerías del centro de Guadalajara para surtir lo que los paquetes escolares entregados por el Gobierno no tienen y, conforme el plazo se vaya a cumplir, las filas se verán más largas.
La señora Maritza Mata indicó que comenzó a buscar los materiales que requieren sus hijos y al dedicarle suficiente tiempo a esta tarea, ya lleva la mitad de los útiles comprados.
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Pero más allá de si hay gente, si se necesita hacer largas filas y, en ocasiones bajo el rayo del sol, lo que también afecta y quizás mucho más que todo lo anterior es sin duda la inflación que provoca aumentos.
“Sí subió bastante todo”, señala con pesar, ya que los vales que entregaría el Gobierno para comprar en las papelerías autorizadas, aún no le llegan y la versión con la que cuenta es “que los van a dar hasta regresando a clases y eso ya no me sirve de nada porque los van a dar hasta después” y, a la fecha, lleva más de dos mil pesos gastados en sus dos hijos.
Es por eso que la ayuda prometida por las autoridades de poco le sirve, por lo que pide a las administraciones públicas que los manden con mayor tiempo y realmente aprovechar lo que prometen las autoridades.
Mientras que Janet Andrade, quien también aprovechó el fin de semana para ir de compras escolares para ver qué se va a necesitar y, desde su punto de vista, “me pusieron muchas cosas y los precios están más o menos que el año pasado”.
De los vales que entregarían las autoridades de Jalisco y de los municipios a ella tampoco le llegaron y aseguró “no nos dieron ningún vale, pero a compañeros de otras escuelas sí les entregaron y era de 250 pesos, pero a mí no me tocó y esos recursos sólo alcanzan para comprar solamente los cuadernos”.
En medio de las risas por la cantidad que cubre el vale, menciona que tiene dos hijas y una va a la primaria, en segundo año y recomendó ir con tiempo a comprar los útiles para aprovechar los descuentos que hay en los establecimientos de la calle Santa Mónica y San Felipe, ya que los consideró buenos para su economía.
Explicó que las mochilas entregadas por las autoridades no traen lo que necesitan y sí varios materiales que no van a permitir dar y “entonces uno vuelve a pagar lo que se necesita, porque esas en el caso de preescolar no piden cuadernos, pero sí colores y pinturas, elementos que no traían.
Mientras que el señor Juan López, quien labora en una papelería de la calle de Santa Mónica mencionó las ventas “este año están lentas y los precios sí han subido y no hay producto, está escaso por eso se aumentan los costos”.
En el lugar que él está, un cuaderno puede costar desde 10 pesos, uno de forma italiana o francés en 20 pesos, 50 hojas blancas por cinco pesos, entre otros precios que buscan tener bajos.
Señaló que entre 20 y 30 por ciento bajó el número de personas a los establecimientos, pero lo que les hace más falta es la presencia de elementos de la policía, ya que hay demasiados ladrones de celulares.
