A casi dos años de la embestida contra los ladrilleros, que implicaba meterlos al orden y un apoyo inicial de 20 millones de pesos, habrá que empezar de nuevo, la última reunión de hace unos días en Tonalá revela que hay requisitos imposibles de cumplir y -quizás lo más grave- que del último censo a la fecha hay 100 hornos más donde se quema de todo, generando mucha contaminación.

El encuentro fue en el municipio que alberga la mayor parte de las ladrilleras y los grandes ausentes fueron el presidente municipal y el secretario general, que por su parte envió un representante. Además estuvieron el director de Inspección y Reglamentos, el titular de Protección Civil y el de Ecología Territorial, dos representantes del Ayuntamiento de Tlaquepaque, además de organismos ciudadanos.

UN PLAN QUE SE HIZO HUMO

El 18 de octubre de 2017 la entonces titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) Magdalena Ruíz Mejía, dio a conocer que en Jalisco existían 22 mil personas dedicadas a la producción de ladrillos de manera artesanal y de esta cantidad se estima que 2% son menores de edad, es decir, alrededor de 440 niños que ven mermada su calidad de vida,

Ella anunció que por instrucciones del entonces gobernador, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, se haría una inversión de 20 millones de pesos para la modernización de ladrilleras a través del “Proyecto Piloto del Modelo de Parques Ladrilleros Sustentables”, para evitar que mantuvieran sus métodos tradicionales que sólo generan contaminación.

Sin embargo lo que se anunciaba como un moderno modelo que incorporaba hornos de bajas y nulas emisiones, que facilitaba el acceso de combustibles limpios y materias primas certificadas, hoy no existe ni el menor rasgo… ni del esfuerzo ni del dinero.

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QUE SIEMPRE NO

El anuncio hecho hace unos días en la sesión en Tonalá sorprendió a los presentes: La norma de Semadet emitida la pasada administración es prácticamente imposible de cumplir por parte de los ladrilleros.

Se asegura que la misma contiene demasiados requisitos, muchos de los cuáles son imposibles de cumplir.

Se trata de la Norma Ambiental Estatal “Criterios y Especificaciones Técnicas para la Ubicación, y Operación de Unidades Productoras de Cerámicos en el Estado de Jalisco” (NAE-SEMADET-002/2018).

Esta fue emitida el 23 de mayo del 2018, en el ocaso de la pasada administración, y la misma incluye criterios de ubicación, almacenamiento de materias primas, operación del parque ladrillero, almacenamiento de combustibles, entre otros.

Semadet dio a conocer entonces que durante dos años trabajó en coordinación con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), la Coalición del Clima y Aire Limpio (CCAC), El “Clean Air Institute” (CAI) y la Red Latinoamericana de Políticas Públicas para la Producción más Limpia del ladrillo artesanal.

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Y MIENTRAS LAS REGULARIZAN….CRECEN

Dentro de este mismo encuentro quedó claro al momento de revisar el censo que mientras se les regulariza, las mismas crecen.

Al momento de analizar el censo se han encontrado con que hay 373 ladrilleras solo en los alrededores del Fraccionamiento de Hacienda Real y la zona de Santa Paula, es decir, 100 ladrilleras más en comparación con el año pasado.

Esto implica que ahora se proceda a regularizarlas mediante un permiso o licencia e incluirlas dentro del reglamento municipal.

También estos mismos ciudadanos pusieron en evidencia que el municipio de Tonalá no forma parte de la red de monitoreo de la calidad del aire, solo tiene una terminal en Loma Dorada, pero no en otras zonas que podrían estar pasando por una situación aún más complicada.

Conoce más...

• 22 mil personas dedicadas a la producción de ladrillos de manera artesanal
• 373 ladrilleras sólo en los alrededores del fraccionamiento de Hacienda Real
• 23 de mayo de 2018 se emitió la Norma Ambiental para Productoras de Cerámicos.