Ante los cambios vertiginosos que tienen los nuevos clientes de la industria mueblera es necesario cambiar las técnicas de producción y dejar en el pasado la elaboración artesanal para pasar a elaboración en serie, a menores costos ya que las nuevas generaciones no buscan muebles para toda la vida, sino cambiarlos en el corto plazo, señaló el presidente de la Asociación de Fabricantes de muebles de Jalisco (Afamjal), Abelardo Arriola.

“Hoy lo que es valorado es el mueble de producción más en serie, es decir el trabajo más artístico, consecuencia de un trabajo artesanal, ya no es tan valorado en el mercado, ahora el mueble en serie, con procesos industriales y apoyados con la tecnología” es lo que comienza a dominar el mercado en todo el mundo y esto porque los jóvenes buscan renovarlos constantemente.

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Es por eso que el trabajo de un mueble de ebanistería y aspectos artísticos que eran valorados por las personas mayores de 40 años, ahora ya no funcionan al 100% porque “las nuevas generaciones ya no voltean a ver ese tipo de muebles, para empezar los nuevos consumidores que vendría a ser la generación millennials y quizás la zeta, amueblan sus casas de manera temporal, porque ellos quieren actualizar el mobiliario y se nos movió el chip que teníamos de comprar un mueble que durara mucho y tener el gusto de heredárselo a la siguiente generación”.

Abelardo Arriola indicó que ahora la pasar a un piso de venta de una mueblería que atiende a este tipo de mercados se observará que el perfil de producto es totalmente diferente a la mueblería tradicional, con precios más bajos al tener maquinaria de última generación que permite a producir a costos más bajos y quien no migre a ese campo corre el riesgo de salir del mercado ante la imposibilidad de competir con las nuevas tendencias de compras.

Sin embargo los fabricantes tienen como ventaja y sello característica los procesos artesanales, “el amor que le tienen a la profesión de muebleros muchos de nuestros industriales” que aún le apuestan al trabajo artesanal pero eso “nos pone en condiciones poco competitivas, pero ese ha sido el sustento para nuestras empresas”.

Es decir buscan mantener las tradiciones de muchos años en la elaboración de los muebles ya que la consigna es que duren para siempre o al menos eso era lo que pensaban las generaciones más veteranas, pero eso poco a poco cambia y los fabricantes también.