A pesar de la temporada baja de influenza, en las últimas semanas en Jalisco se han notificado nuevos casos y decesos, contrario a lo que sucedió en la temporada más alta del virus.
Desde la segunda semana de marzo se confirman entre tres y cinco casos, por lo que a la fecha ya son 67 confirmaciones, y han perdido la vida en total cinco personas por las complicaciones que el virus ocasiona al organismo.
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En cambio, en el mismo periodo del año pasado (correspondiente a la temporada invernal 2020-2021) en la entidad apenas se registró un caso de influenza, al situación fue atribuido a las medidas de mitigación para Covid-19 como el uso de cubrebocas, distanciamiento, lavado de manos y menos frecuencia de viajes.
El virus de influenza es de transmisión persistente durante todo el año, los meses considerados altos es la temporada invernal de octubre a marzo, pero aún así continúa la circulación en abril y mayo.
Este tipo de virus afecta las vías respiratorias, pero en casos graves existe el riesgo de que afecte los pulmones y los bronquios.
Los síntomas son fiebre, malestar general, dolor de amígdalas, faringe, tos, cefalea, mialgias y postración.
En algunas personas la influenza puede representar un grave riesgo para la salud como quienes padecen comorbilidades asociadas a la gravedad, obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, portadores de VIH y pacientes sujetos a terapias inmunosupresoras.
En México, las infecciones respiratorias agudas son el principal problema de salud, se sitúan dentro de las 10 principales causas de defunción, dentro de estos padecimientos el virus de influenza.
En esta temporada de calor y de vacaciones, en el país han aumentado las enfermedades respiratorias, de tipo gastrointestinal y aquellas relacionadas con las temperaturas extremas.
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