Día dos. La vacunación continúa en San Pedro Tlaquepaque y en el ITESO, a donde más gente ha acudido y más dosis se han aplicado, mil 565 solo el lunes, los ciudadanos vuelven a retomar la organización. Hacen fila y reparten fichas.
Saben que serán, otra vez, alrededor de mil 500 vacunas, hasta eso de las 16:00 horas o un poco más, cuando se acaben y, por lo tanto, reparten mil 600.
Advierten que los servidores de la Nación no pueden con “la chamba” -afirma don Salvador- y por eso “hemos decidido organizarnos, no queremos que se hagan bolas y esto se salga de control”.
Esta vez menos durmieron a las afueras, pero en cambio sí llegaron muy temprano, 5, 6 y 7 de la mañana, “ya había mucha gente, pero son los de adelante, los que ya se estaban organizando”.
Muchas personas comenzaron a acumularse en la puerta argumentando dudas y justo a ellas se les anotó en una lista, se les invitó a formarse y se les entregó una ficha.
“Se trata de que sepan más o menos en qué número van”, explica, mientras invita a los que van llegando a que se vayan a formar.
Asegura que nadie les dice, nadie les informa, “ayer fue igual, yo ya llegué muy tarde, nos enteramos en la mañana, pero hoy si nos venimos temprano y ya escuché en la radio que habían vacunado a mil 565, entonces decidimos yo y unos vecinos quedarnos, estamos por debajo del 800, así es que a lo mejor nos tardamos, ayer algunas personas dijeron que se formaron siete y doce horas, así es que esperamos salir ya en la tarde, pero bien vacunados”.
Reiteró que fuera no traen mucha logística, “ya dentro de la universidad sabemos y nos dijeron ayer, están más organizados, nos sientan y pasan a vacunarte, eso ya es rápido, tarda más por que te dejan un rato bajo observación médica”, explicó don Salvador que ya tiene 68 años de edad y todo este tiempo se ha estado cuidando; “se me fueron varios amigos, vecinos, conocidos, ellos no alcanzaron la vacuna, espero que yo sí”.