Especialistas advierten que entre 30 y 50% de las mujeres en edad reproductiva no reciben técnicas de preservación de fertilidad previas a tratamientos oncológicos; la quimioterapia, radioterapia y extirpaciones quirúrgicas producen efectos secundarios relacionados con la fertilidad.
En el panel “Preservación de la fertilidad previa al tratamiento oncológico” señalaron que a medida que las tasas de curación y supervivencia aumentan, la atención de los efectos secundarios de los tratamientos cobra mayor relevancia, ya que impacta de manera negativa la salud y la calidad de vida de las mujeres y los hombres.
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Ante esta situación que enfrentan las mujeres, coinciden en que es indispensable que el personal médico hable del riesgo de infertilidad y las opciones de fertilidad con cada paciente antes de iniciar el tratamiento contra el cáncer.
Durante el panel virtual la líder médico de Cáncer de mama, Roche México, Sandra Angélica Ávila, señaló que la oncofertilidad y su progresiva implementación será cada vez una necesidad real.
“Es primordial que en el futuro próximo se puedan atender los requerimientos de tratamientos de preservación de fertilidad ya sea por razones físicas, médicas y sociales”.
Indicó que si es de interés del o la paciente el preservar la fertilidad, debe solicitar una derivación a un especialista en reproducción, incluso si no está seguro de si desea tener hijos en el futuro.
Entre los tratamientos contra el cáncer que tienen efectos secundarios relacionados con la fertilidad, describieron: la quimioterapia, en particular los medicamentos llamados agentes alquilantes; la radioterapia: en el abdomen, la pelvis, la parte inferior de la columna vertebral, los ovarios y áreas cercanas a los ovarios, el útero, la glándula pituitaria en el cerebro o todo el cuerpo para trasplante de médula ósea; y las cirugías traducidas en extirpación quirúrgica ya sea del útero, el cuello uterino y de uno o ambos ovarios.
Hoy en día existen tratamientos de preservación de fertilidad eficientes para los diferentes escenarios clínicos posibles, dando a las pacientes con cáncer la oportunidad de un embarazo exitoso cuando hayan superado su enfermedad.
Cada año, en el mundo se diagnostica con cáncer a más de 14 millones de personas y 8.2 millones pierden la vida por esta enfermedad.