El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez encabezó la entrega de la declaratoria como Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado a la manifestación de "El mariachi en su diversidad regional y sus contextos sociales".
En el marco de la inauguración del XIX Encuentro Nacional de Mariachi Tradicional, que se llevará del 16 al 20 de septiembre de manera virtual, el ejecutivo estatal reconoció el trabajo detrás de esta declaratoria, la cual se formalizó tras su emisión en el Periódico Oficial del Estado en agosto pasado, y que se viene a sumar al reconocimiento que esta manifestación ya tiene por parte de la UNESCO.
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"Esta declaratoria, en la que empezamos a trabajar prácticamente desde que llegamos al gobierno, formaliza legalmente todas las estrategias que ya se venían llevando a cabo a favor del mariachi, como las escuelas donde niños y jóvenes aprenden la música, los encuentros donde se revive la tradición con participantes de todo México y el mundo".
Señaló que la iniciativa surgió desde las personas a quienes reconoció por haber luchado tanto tiempo para llegar a esta declaratoria estatal que enarbola la tradición más allá de un producto cultural musical, sino como un arraigo social en las diferentes comunidades y regiones, y su permanente transformación.
"El Gobierno del Estado hizo su parte y acompañó este proceso durante meses para llegar a este día con una enorme alegría para poder materializar esta lucha de tantos años. Hoy celebramos al mariachi, celebramos a Jalisco, y celebramos a México. Lo hacemos en condiciones extrañas, difíciles, en medio del riesgo, con miedo por los efectos de la pandemia, pero también con esperanza y alegría, y la confianza de que vienen tiempos mejores".
Por su parte, la titular de la Secretaría de Cultura, Giovana Jaspersen, reconoció la declaratoria pues atenderá las variantes musicales, instrumentos, letras, danzas y vestuarios que existen en todo el territorio de Jalisco.
"Declarar no es solo reconocer la herencia que nos honra como jaliscienses, sino también reafirmar un compromiso con la protección y la salvaguarda; gestionar acciones concretas para que el acto jurídico sea un marco de muchos fondos que nos permitan preservar el patrimonio cultural para las generaciones futuras. Que siga habiendo compositores, músicos, intérpretes, públicos, que porten la tradición con dignidad y orgullo".
