En el Poder Legislativo se callaron las diputadas de diversas fracciones parlamentarias en la Reforma Electoral recién aprobada porque dejaron fuera a jueces, magistrados, titulares de órganos jurisdiccionales, funcionarios del Sistema Estatal Anticorrupción y del Gobierno del Estado en exigirles y quedara asentado en la legislación que no se pudiera acceder a cargos públicos de importancia si se contaba con antecedentes de violencia de género.
De la misma manera, adoptar la paridad de género en distintos órganos como en la integración del ITEI, en la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en los cargos públicos del Gobierno del Estado, de la Fiscalía y del Poder Judicial.
La diputada local, Sofía García Mosqueda cuestionó ¿dónde quedaron esos discursos que hablaban de la participación de las mujeres como un factor indispensable para construir un mejor país y un mejor estado? ¿dónde quedó la paridad que tanto celebramos?.
Recordó que su propuesta era que se establecieran candados para que aquellos que son deudores alimentarios y quienes han agredido sexualmente o por razones de género quedaran impedidos de llegar a ser gobernador, diputado, munícipe, juez, magistrado o servidor público.
"Parecía caminar bien en su totalidad, pero no fue así. Porque si bien se dictamina que se requiere cumplir con algunos de estos requisitos para los cargos de elección popular, se rechaza que esta misma propuesta se haga válida para jueces, magistrados, titulares de órganos jurisdiccionales, funcionarios del Sistema Estatal Anticorrupción y funcionarios del Gobierno del Estado".
En lo personal , agregó "me quedo con un sentimiento agridulce. Porque si bien avanzamos en nuestra lucha contra la violencia de género, se puso un freno a la paridad total".