De repente la alarma del edificio comenzó a sonar, señal de que todos tenían que abandonar el edificio de Palacio de Gobierno.
De forma ordenada debían ir a la calle para concentrase en los puntos de reunión establecidos por los comités de Protección Civil interno.
Así, en punto de las 11:30 horas comenzó el Macrosimulacro por sismo, mismo que se replicó en todo el país.
Por si no lo leíste:
Uno a uno los trabajadores del edificio fueron saliendo ordenados, caminando, sin gritar, sin llevar comida, ni agua, todos con lo que alcanzaron a tomar en el momento de que se activó la alarma.
Así, entre todos los trabajadores bajó el secretario general de Gobierno, Enrique Ibarra Pedroza, rodeado de elementos de seguridad, secretario particular, colaboradores y del titular de Protección Civil del Estado.
En la calle todo parecía normal y que el ejercicio pasaría como uno más exitoso, sin embargo, una manifestación de familiares de desaparecidos cambió el panorama y a los funcionarios les urgía terminar el simulacro.
Tres minutos se llevó desalojar el edificio, según se le informó a Ibarra Pedroza y en todo el Estado se registraron 321 mil personas para formar parte del Macrosimulacro en más de tres mil 300 inmuebles.
En el caso de Palacio “son tres minutos aproximadamente lo que significó para la evacuación, y yo creo que lo más importante es que cada día es creciente la cultura a la prevención y siempre estar más preparados”.
En ese sentido, reconoció que los trabajadores lo toman con seriedad y en todo el estado se fortalecen las áreas de Protección Civil para que la gente tenga una actitud positiva, mientras hablaba de eso.
A lo lejos, se escuchaban los gritos de reclamo por la falta de acción de las autoridades judiciales para investigar, lo cual por momento atraía la atención del funcionario y su equipo de seguridad.
Aprovechó para hablar de las grietas en el sur de la entidad, en donde se tienen registros de fallas geológicas que se dieron hace dos millones de años, según los científicos y desde hace 200 años se tienen registros de movimientos telúricos, por lo que se evalúan las medidas a adoptar y la carretera de Sayula a Zacoalco permanecerá bajo vigilancia y cerrada hasta que no se tenga ya con claridad el riesgo y se recomienda utilizar la autopista.