Ahora fue en Tototlán, Jalisco, donde la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa) clausuró de manera parcial y temporal a una granja porcícola, por la inadecuada gestión y destino final de sus residuos de manejo especial.
Las acciones contravienen la normatividad ambiental del Estado de Jalisco e implican sanciones.
Te recomendamos:
El motivo fue el inadecuado acopio y manejo de la cerdaza que realizan en el lugar, ya que ésta se escurre por las casetas hacia unos canales laterales de concreto sin ningún tratamiento previo y hacia el exterior de la granja, lo que podría ocasionar una posible contaminación del suelo y del agua por la infiltración de los referidos residuos.
Inspectores detectaron lo anterior durante una visita y decidieron colocar cinta delimitadora y sello de clausura como una medida de seguridad para evitar un posible daño ambiental del lugar, con fundamento en el Artículo 144 Fracción I de la Ley Estatal de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LEEEPA).
La medida de seguridad permanecerá, hasta en tanto se acredite realizar las adecuaciones necesarias para evitar la contaminación y el correcto manejo y disposición de los residuos, así como las condicionantes que para el caso fueron impuestas por parte de la Proepa.