El Grupo de Amistad México - Cuba de la Cámara de Diputados que preside la diputada federal por Jalisco, Laura Imelda Pérez Segura rechazan las actitudes discriminatorias y divisoras de algunos personajes de la vida pública contra la misión de médicos.
Hacen un llamado a la unidad, a dejar de lado los intereses personales, a que "seamos más solidarios para que superemos con éxito la situación de emergencia por la que atraviesa México y el mundo".
En México, intereses político-partidistas pretenden demeritar a la misión cubana que llegó al país desde finales de abril.
Se trata de cerca de 700 médicos, enfermeras, ingenieros biomédicos y epidemiólogos que realizan labores de cooperación técnica, científica y académica para la atención directa, capacitación y monitoreo epidemiológico para enfrentar el virus SARS-COV2, en distintas entidades federativas de la República Mexicana, a través de un convenio entre gobiernos locales y el INSABI.
En México el sistema de salud ha sido víctima de descuidos y de malos manejos; desde el año pasado el Presidente Andrés Manuel López Obrador inició un proyecto de basificación y mejoras laborales que beneficiarán a cerca de 80 mil trabajadores en un proceso que llevará varios años.
Derivado del déficit de personal de salud de más de 270 mil médicos a nivel nacional, el Gobierno de México lanzó dos convocatorias, una en marzo y otra a principios de abril para contratar profesionales de la salud ante la llegada del Covid-19, informó el Grupo de Amistad México-Cuba.
Agregó que, desde entonces, el IMSS ha contratado a 17 mil profesionales para atender la pandemia, pero no son suficientes.
Es así como el 24 de abril la Secretaría de Salud federal publicó en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo, en el que se establece que "por el tiempo que dure la emergencia sanitaria generada por el virus SARS-CoV-2" se podría contratar a profesionales con formación en el extranjero.
La Misión Médica de Cuba en México es temporal, y se sustenta a través de convenios con tiempo y servicios determinados.
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"No representa riesgo alguno para las y los trabajadores de la salud en México, y sí representa un apoyo para el personal médico. El respaldo es recíproco, ya que Cuba que aún sufre por un bloqueo comercial y económico, se hace llegar de recursos a través de los médicos voluntarios en distintos países en los que prestan servicios", subrayó.
Las misiones cubanas "salvan vidas, son recibidas y despedidas entre aplausos de la población de los países donde se desempeñan, pero en México, los intereses distintos a los de la mayoría de los mexicanos pretenden empañar la excelente labor del personal médico de Cuba, muchos de ellos como voluntarios para ayudar a las naciones que visitan, como a la propia".
Califican de injusto que "las preocupaciones y dudas legítimas de la comunidad médica mexicana se utilicen de manera perversa por parte de actores contrarios a los intereses nacionales, con clara intención de polarizar y generar incertidumbre, buscando abonar a sus propias agendas personales, cuando en estos momentos se requiere de la unidad para hacerle frente al rezago histórico en el que se encuentra nuestro sistema de salud".