Lograr que el Congreso de Jalisco emita la Ley de Cultura de Paz en la entidad es una de las metas en las que trabajará la regidora de Movimiento Ciudadano en Guadalajara, Rocío Aguilar Tejada, a partir de los talleres que realizó el año pasado con este tema enfocados para menores, con la finalidad de concientizarlos de los efectos de la violencia.
“Estamos por firmar un convenio de colaboración con el Congreso, el Instituto de Justicia Alternativa, el Colegio de Jalisco para hacer mesas de trabajo e implementar políticas públicas. En el Congreso estamos trabajando porque ya va salir a la Ley de Cultura de Paz”, la cual confía que salga en este mismo año y se ponga en práctica en la entidad.
Contempla que en los 125 municipios se elabore un reglamento acorde a sus condiciones y estas políticas se reflejen en programas de acción dirigidos a menores, adolescentes, padres de familia, maestros y que "desde su trinchera la practiquen y que haya una reeducación” para eliminar poco a poco los aspectos de la violencia.
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El sustento de este objetivo es porque, durante la pandemia, la violencia dentro de los hogares se incrementó de manera importante.
A partir de que se contaron con los datos, se buscó -primero- realizar acciones en el municipio y ahora llevarlo al Congreso, en donde se comenzaría a perfilar lo que sería la ley a partir de las mesas de colaboración.
Con la experiencia que ha tenido en este tema, Aguilar Tejeda considera que debe de contener -principalmente- el tema de la prevención, antes de la reacción, ya que desde su punto de vista así se pueden evitar conflictos y los menores de edad tendrían otro tipo de historia de vida que no los lleve a realizar acciones violentas.
Dijo que hablar de la cultura de paz “nos ha llevado a una convivencia entre las familias, los iguales que en este caso que son los niños y al darme cuenta que ya no juegan como antes con los juegos tradicionales, de estrategia de convivencia” y lo hacen con juegos con violencia integrada, es por eso que impulsó la iniciativa llamada “El Juego como instrumento de Cultura de Paz”.
A partir de esta iniciativa del trabajo hecho en Guadalajara, la edil tapatía mencionó que reunieron a más de tres mil menores en diversos eventos en el Paseo Alcalde y en donde participaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, ya que el programa implicaba un canje de juguetes bélicos como pistolas, espadas, hachas, entre otros que eran destruidos en el momento y se les daban juguetes didácticos.
“No sólo era que el menor intercambiara su juguete y se fuera a su casa, no, más allá el hacer conciencia, hablar de derechos humanos, justicia alternativa, del DIF Guadalajara, del Trompo Mágico con talleres educativos y lúdicos”.
En este contexto, dijo que se busca que, de nueva cuenta, los padres de familia enseñen a sus hijos a utilizar los juegos de destreza, que se involucren en el desarrollo de los mismos, que los menores aprendan a utilizar la destreza de las manos, coordinar los pies, pensar la estrategia -pero sobre todo- tener un rato de convivencia y se tenga una competencia sana.
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