Aprovechó su comparecencia el juez del Juzgado Especializado en Juicios Orales de violencia contra la mujer Mario Murgo Magaña para pedirle ayuda a los diputados y diputadas de la Comisión de Seguridad y Justicia, ya que tienen un año y medio solicitando más espacio físico a la Fiscalía Estatal y al Consejo de la Judicatura y es fecha que nada. No sirve el equipo de audio y video, por lo que no se puede resguardar la identidad de las víctimas y testigos protegidos.
En este Juzgado Especializado en violencia contra la mujer. donde sólo existe una sala de audiencias para 5 jueces y donde deben darse aquí las audiencias porque se encuentra en el Centro de Justicia de la Mujer, la justicia es dilatoria para la mujer.
El juez aspira a ser magistrado y en el último día de entrevistas ante la Comisión, reconoció que no era el espacio para hacerlo, pero pidió ayuda a los legisladores, porque no tienen respuesta ni de la Judicatura ni de la Fiscalía. Al término de su entrevista se acercó a hablar con él la diputada del PRI Mariana Fernández Ramírez a quien le admitió el juzgador que estaba consciente de que podían removerlo por la denuncia pública que hizo. Posteriormente el diputado del PAN Gustavo Macías Zambrano le preguntó sobre los juzgados de la Zona Norte (en donde estuvo el juez).
Solo existe una sala de audiencias, "estaba equipada cuando yo llegué, pero en junio se descompuso el audio y video, ni la de testigos porque no sirve, tiene más de un año que no sirve y nadie la ha arreglado, grabamos cada juez, nos compramos una camarita y grabamos ahí las audiencias, pero cuando se trata de resguardar la identidad de las víctimas o de los testigos no tenemos la manera", indicó en entrevista.
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¿Qué hacen? Ante ello, responde: "Le decimos a la víctima la problemática si quieren estar en presente, yo en lo particular tengo que pedir una audiencia en los juzgados de lo penal y ya que me dan la fecha lo trasladó a lo penal, hay otras compañeros que manejan otras estrategias. Somos cinco jueces pero hay audiencias como una que ocurrió hace días que duró ocho horas".
Ante esto, si él tiene una audiencia, los demás jueces no pueden hacer nada porque solo existe una sala o viceversa, si alguno de ellos tiene una audiencia, él se tiene que esperar, "si entra una compañera yo no puedo hacer nada aunque tengo mucho trabajo".
Este año van por las dos mil carpetas de investigación, la ley establece una audiencia inicial en 15 días, porque no hay salas para realizarlas. De hecho están alargando las audiencias hasta dos meses por estas situación que enfrentan. Cuando hay detenidos, el proceso es inmediato.
"Ya le pedimos apoyo a Fiscalía, no nos dan espacio, no nos arreglan las salas, ni el Consejo de la Judicatura que también sabe y no nos arregla nada, eso propicia que se están tardando para celebrar las audiencias".
Aclaró que este es el único lugar para celebrar las audiencias porque está dentro del Centro de Justicia de la Mujer.
"Yo podría celebrar audiencias en la penal, si a mí me autorizan, pero eso implicaría mover a las víctimas y testigos protegidos. Necesitamos más espacios y no los quieren abrir, estamos colapsados".
En el 2019 fueron mil 248 carpetas y en este 2020, al último día de octubre eran mil 923 y a estas fechas ya están rebasadas las dos mil carpetas de investigación.
No todas llegan a juicio, hay salidas alternas. Más de la mitad se van a salidas alternas.
Esta sala es todo lo relacionado a violencia contra la mujer.
"Sí es dilatoria la justicia para la mujer, ¿por qué no hay espacios para el desahogo de audiencias?" refirió.