Llaman a establecer límites a menores en uso de redes sociales

6 de cada 10 niños mexicanos entre 6 y 11 años tienen acceso a internet: María del Rocío Reyna

Elizabeth Ríos | El Occidental

  · miércoles 3 de febrero de 2021

Foto: Cortesía | Comunicación UAG

Porque puede afectar diversas áreas de la vida de los niños como el crecimiento emocional, cognitivo o la salud, la académica de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), María del Rocío Reyna Camarillo, llamó a padres a establecer límites a sus hijos en el uso de las redes sociales.

La también directora del colegio Lomas del Valle campus Acueducto, de la UAG, recalcó la importancia por poner atención en este aspecto, ya que de acuerdo a la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH), 6 de cada 10 niños mexicanos entre 6 y 11 años tienen acceso a internet y utilizan redes sociales.

“Las redes están diseñadas para que los usuarios pasen el mayor tiempo posible navegando en ellas. Ofrecen sugerencias de entretenimiento y diversos productos, se actualizan constantemente y atraen la atención de todos”.

Dijo que la naturaleza de las redes sociales puede afectar de manera significativa a niños y jóvenes en una de las etapas más importantes de su desarrollo personal, por el contenido que ofrece, en la autoestima, la atención, concentración, capacidad de aprendizaje, pensamiento y hasta ciclos de sueño.

Chécalo:

“En esta etapa de su vida los niños y jóvenes están muy receptivos a los cambios. Están aprendiendo a pensar de manera crítica y las redes pueden afectar esa etapa de su vida, también están reforzando su autoestima y comprendiendo quiénes son en la vida, sobre el mundo y cómo los juzgan las personas a su alrededor”.

Como ejemplo de esto mencionó el recibir los famosos “likes” o conseguir seguidores, pues el percibir pocos por fotos, videos u opiniones los llevan a tomar decisiones extremas sobre qué publicar en sus redes, al grado de llegar incluso a crear contenido peligroso para su privacidad e integridad.

Por ello, pugnó porque padres establezcan modelos sencillos de hábitos, educación, enseñanza y estilo de vida, en donde se involucren más en la vida de sus hijos para conocerlos, saber qué hacen y qué consumen.

“Reconectarnos con los largos períodos temporales. Uno de los problemas que hoy tenemos sobre nuestro pensamiento es siempre tener en cuenta el presente y no entender que todo lo que hacemos tiene injerencia en el futuro. Por lo tanto, se deben pensar como constructores de catedrales, que nunca se ve terminada nuestra obra y todo lo que hacemos hoy impactará en el futuro. Nuestros hijos impactarán en el futuro de todos: ¿cómo quieren que sus hijos lo hagan?”, añadió.