El legado del exgobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, como el hombre público que fue, está palpable en la ciudad y el estado que gobernó, sin embargo, como persona, estará presente en el corazón de quienes lo recordarán con cariño, manifestó el alcalde de Guadalajara, Ismael del Toro Castro.
Durante el homenaje de cuerpo presente que se hizo esta mañana en el Ayuntamiento de Guadalajara, el presidente municipal recordó al también ex alcalde tapatío como un hombre comprometido con la amistad y la lealtad.
"En la ciudad está palpable el legado de todos los actos que tuvo por Guadalajara y el estado de Jalisco. Pero creo que el legado más firme, más fuerte de Jorge, es lo que representa en el corazón de todos. El legado más firme que tiene es su compromiso con la amistad, con la lealtad, con su familia".
Condenó los hechos de los que fue víctima el exgobernador tricolor, al señalar que todos como autoridad deben asumir su responsabilidad ante un terrible hecho que dañó al Estado y la sociedad.
Además, recordó a Sandoval Díaz en sus años de juventud, cuando ambos se conocieron desde la secundaria y afianzaron su amistad en la universidad, como preludio del camino que recorrerían juntos, a su manera, en la política por el bien de Jalisco.
"Sin duda en este palacio municipal a su paso como regidor y como presidente, como todo lo que hizo como política y en su trayectoria, deja un legado muy importante para la ciudad (...). Con este honor te honramos, amigo, con tristeza y honradez tu trabajo haciendo lo propio para beneficio de nuestra sociedad", agregó el alcalde emecista.
Con palabras de su esposa, Lorena Jassibe Arriaga, funcionarios y demás presentes en el homenaje de este mediodía despidieron al ex gobernador con aplausos.
A esto último se vino a sumar los coros y demás consignas de apoyo de ciudadanos que se conglomeraron en las inmediaciones del palacio municipal, quienes esperaron antes y después de su partida para despedirlo con mariachi y cantos.