Como parte de los operativos de supervisión durante los festejos patrios, el Gobierno de Guadalajara llevó a cabo la clausura de tres establecimientos por incumplir diversas normas del municipio.
En un afán de evitar la presencia del ambulantaje y revisar las condiciones en las que operaron comercios semifijos en los principales puntos de la ciudad, integrantes de la dirección de Inspección y Vigilancia dieron con tres establecimientos que violaron sellos de clausura, no aplicaron medidas sanitarias de cara a la pandemia por Covid-19, o que no contaban con las licencias correspondientes para el consumo de bebidas alcohólicas o la realización de eventos masivos con venta de boletos.
A decir de Julián Enrique Cerda Jiménez, titular de Inspección y Vigilancia, se supervisaron a 700 giros comerciales en ambos turnos, con un estado de fuerza de 150 trabajadores municipales.
"Se desplegó un estado de fuerza para blindar al primer cuadro de todo lo que es el comercio informal y garantizar que la ceremonia del Grito de Independencia se pueda llevar a cabo con total seguridad, con todas las medidas sanitarias".
Por ello, los operativos se enfocaron también en revisar que restaurantes respetaran el aforo permitido, que contaran con las medidas sanitarias, y que los comensales acudieran a consumir alimentos y se retiraran, sin propiciar la convivencia. Además, se vigiló que bares y centros nocturnos permanecieran cerrados ya que todavía no tienen permitido operar.
Con el objetivo de mantener una agenda de orden en la ciudad, estas acciones de supervisión continuarán de manera constante, por lo cual llamaron a la ciudadanía a apegarse a los reglamentos municipales y las medidas sanitarias debido a la pandemia.