Abordar los costos que tendría terminar las obras complementarias de la presa El Zapotillo pero sobre todo el saneamiento del Río Santiago para comenzar a resolver los problemas de abasto de agua potable para el Área Metropolitana de Guadalajara, fue el objetivo del viaje que hizo este lunes el Gobernador Enrique Alfaro Ramírez a la Ciudad de México.
Con este viaje se da seguimiento al compromiso que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador en su reciente visita a la entidad y en donde prometió realizar las obras de infraestructura necesarias para que no se tengan estos problemas, por el eso mandatario fue a la capital del país para darle seguimiento a esta promesa.
Indicó que en este momento la prioridad es retomar la discusión del tema de las obras pendientes que desde hace dos años están detenidas para poder aprovechar el agua del Río Verde y que podrían ser “la única opción real para resolver el problema de abasto” en la ciudad y afecta ya a miles de personas y que si no se actúa a tiempo “puede generar una crisis mayor” para el próximo año.
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Ahí se reunirá con Lázaro Cárdenas Batell, quien es el coordinador de asesores, y fue el designado por el presidente López Obrador para atender el tema, por lo que Alfaro Ramírez espera resolver esta situación lo antes posible y con ello también terminar las obras complementarias de la presa El Zapotillo y el Sistema Derivador del Purgatorio que garantizaría el abasto de agua.
“No tenemos agua, sino aprovechamos el agua del Río Verde y seguimos con estas discusiones que han tenido lugar en los últimos 30 años en Guadalajara con todo mundo opinando y aportando grandes ideas, todo mundo queriendo colgarse medallas, lo que vamos a tener es una crisis de abasto que generaría un problema mayúsculo, lo que tenemos hoy es un desajuste del 15% en nuestro sistema de operación de abasto de agua potable y si tenemos un mal año en términos del estiaje lo que se puede venir es un problema mayúsculo, hoy está afectado un 10% de la población, pero el riesgo de que la afectación sea mayor, es enorme”, aseguró el mandatario.
Insistió en que las obras sólo deben terminarse y que el Gobierno Federal deberá concluir lo que le toca, terminar la cortina, obras complementarias y terminar la Presa Purgatorio en donde “están tirados y enterrados cientos de millones de pesos que no es posible que permanezcan en esas condiciones cuando la ciudad está sin agua”.
Indicó que también se busca que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) les diga cuántos recursos hacen falta para terminar este sistema de abasto de agua porque “han pasado dos años y evidentemente desconocemos si la infraestructura tuvo un deterioro por el paso del tiempo” por eso se necesita actualizar el presupuesto y confía en que el Presidente entendió la magnitud del problema que se tiene.
“Creo que vamos a retomar de inmediato esta agenda que por muchas razones se tuvo que posponer durante este tiempo y es en mucho sentido lo que explica los problemas que ahora estamos viviendo”, ya que la presa El Purgatorio está al 90% de su construcción y El Zapotillo sólo es la cortina y algunos trabajos complementarios.