Usuarios de la alberca olímpica de la Universidad de Guadalajara denuncian que por falta de pago sus instructores amenazan con dejar de darles el servicio a partir del lunes, además de las malas condiciones y falta de mantenimiento a las instalaciones.
Edgar Ortiz Ángeles, uno de los afectados por esta situación y quien paga mil pesos mensuales por sus clases indica que sus entrenadores les comentaron que esta quincena no recibió su pago es por eso que prácticamente van a trabajar bajo protesta y “sí nos dan el acompañamiento, pero no nos dan el entrenamiento conciso”.
Dijo que entienden la situación de sus instructores ya que también hacen su esfuerzo para estar en su área de trabajo, son padres de familia que deben llevar el sustento a sus hogares, se levantan temprano, tiene jornadas largas de trabajo y es por eso que solidarizan con los entrenadores, pero también lamentan que el Centro Deportivo Universitario no dé una explicación al respecto.
“Nos dijeron que el lunes ya no estarían con nosotros, tal vez dentro de las instalaciones sí pero ya no nos harían caso” lo cual es un riesgo para quienes vayan y en especial para las personas de nuevo aprendizaje que aún no saben flotar sin ayuda de implementos, es decir los principiantes que necesitan a su instructor para darles seguridad.
Chécalo:
Ortiz Ángeles señala que a ellos les cobran su mensualidad de forma puntual y si no se hace en las fechas marcadas les cobran una penalización que va del 10 al 15% de su pago, pero no saben qué se hacen con esos recursos ya que las instalaciones no tienen mantenimiento y el agua regularmente está fría.
Explica que aún no saben si harán alguna manifestación, pero apoyan totalmente a sus instructores y como grupo de alumnos analizan todas las posibilidades a su alcance para ayudar a los maestros, ya sea manifestándose o con algunos productos ya que ellos también salen perjudicados ante esta omisión.
Sobre las instalaciones dijo que están en malas condiciones y cada vez es más notorio y también piden cuentas claras de ello porque por algo también pagan una cuota.
“Soy del turno de la mañana y realmente si está bastante fría el agua al momento de entrar ñ, las regaderas es como ir de expedición al Polo Norte porque realmente sí está helado; hay días en los que sí funcionan los calentadores y la alberca sí está templada, pero funcionan un día y puede que cinco no”, señaló.