La Secretaria de Comunicación y Transportes (SCT) dio a conocer que, desde el 2018, existe un dictamen que señala que el agrietamiento del Edificio Plaza, sede del hotel ONE se debe a saturación del suelo por descargas de aguas negras y no por las obras de la línea 3 del Tren Ligero.
De esa manera, se deslinda de posibles demandas que los dueños pretendían imponer, con el acompañamiento que ofreció el propio gobierno municipal de Guadalajara.
Mediante un comunicado, la SCT destaca que de estas condiciones de riesgo informó desde septiembre de 2019 al ayuntamiento tapatío, a Protección Civil del Estado y al Municipio.
Textualmente destaca que “el inmueble se encontraba en situación de “estabilidad precaria” antes de la construcción de la estación Catedral del Tren Ligero”.
Un edificio "recortado"
En los anaqueles de la historia se destaca que este edificio comenzó a construirse en el año de 1952 y fue concluido en 1958.
Por si no lo sabías:
Así como se movió el edificio de Teléfonos de México, de la mano del ingeniero Jorge Matute Remus, es importante recordar que este Edificio Plaza fue recortado con la ampliación de la avenida 16 de septiembre y modificado internamente para su funcionamiento como hotel, además le fueron agregados tres niveles en la parte frontal sin el reacondicionamiento de su estructura.
Dicho inmueble, que se inició a construir en 1952 y fue concluido en 1958, presentó de acuerdo en sendos dictámenes técnicos a cargo de especialistas particulares y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la saturación del subsuelo y la deficiente cimentación del edificio.
Daño estructural por aguas negras
La SCT reiteró que “el daño estructural del Edificio Plaza, sede del Hotel ONE en la Ciudad de Guadalajara, Jalisco; es consecuencia de su propio estado de “estabilidad precaria”, dictaminado desde julio de 2018 y no tiene vinculación alguna con la construcción de la estación Catedral de la línea 3 del Tren Ligero de esa ciudad capital”.
El Dictamen Estructural del Edificio solicitado por el Hotel, de fecha 9 de julio de 2018, elaborado por el Doctor en ingeniería, Juan Jesús Aguirre Herrera, señala claramente que la causa más probable del agrietamiento del inmueble se debe a los asentamientos derivados de la saturación del suelo, provocada por las descargas de aguas negras del propio edificio.
Hace referencia el mismo estudio que las obras de la Línea 3 se pueden descartar de la causa directa de las fisuras que aparecieron en el inmueble.
Precisa la SCT que ante la complejidad de la obra, así como a la importancia de garantizar las condiciones de estabilidad estructural de los edificios catalogados como históricos y algunos otros en la ciudad de Guadalajara, en su momento la dependencia solicitó al Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México, un estudio sobre la estabilidad de la cimentación del Edificio Plaza y otro estudio sobre las condiciones en las que se encontraba la estructura de este mismo inmueble.
Estos estudios fueron entregados a la Secretaría de Infraestructura y Obra del Estado el 15 de mayo de 2019, mediante oficio número 4.3.-640/2019, en el que se menciona que “es necesario tomar acciones para atender el riesgo que tiene el Hotel, especialmente ante un sismo, ya que los estudios muestran claramente que el citado inmueble se encontraba en un estado de estabilidad precario antes de que se iniciara la construcción de la estación Catedral de la Línea 3 de la Tren Ligero de Guadalajara”.
Posteriormente se solicitó que se realizaran las gestiones necesarias para que se proceda a la rehabilitación de la estructura y cimentación del Edificio Plaza y se tomen las medidas necesarias para asegurar la integridad de los empleados y huéspedes. Hay que recordar que el inmueble ya fue desalojado.