Si bien las medidas preventivas en torno a la pandemia por Covid-19 siguen vigentes, comercios de la ciudad han relajado los protocolos sanitarios; tapetes sanitizantes secos y la ausencia de gel antibacterial se ha vuelto de lo más común en diversos negocios.
En un recorrido por el centro de Guadalajara se constató que cada vez son pocos los giros comerciales que se apegan estrictamente a las medidas sanitarias para atender al público en general, a pesar de que aplicarlos fue una de las condicionantes que les dieron para poder abrir.
Si bien muchos todavía cuentan con los famosos tapetes sanitizantes, lo cierto es que la mayoría lucen secos o descoloridos, sin que empleado alguno se tome la molestia de dejarlos usables.
Aunado a esto, también cada vez son menos quienes ofrecen gel antibacterial en la entrada, ya que mientras unos dejan la botella para que cada quien agarre -la cual muchas de las veces está vacía-, en otros simplemente no hay.
Además, y aunque fue uno de los puntos más exigidos por autoridades, y recriminados por comerciantes debido a su costo, a la fecha son contados los lugares en los que sí toman la temperatura a cada cliente. En este aspecto son particularmente las tiendas o cadenas grandes las que todavía el termómetro es algo que se usa.
"Ya ni lo pisas (el tapete) de lo seco que está, al menos unos todavía te restringen el paso cuando nos juntamos muchos, pero la verdad es que ya en donde quiera ves que se relajó todo, yo le pongo (desinfectante) al tapete unas tres veces porque con el sol se evapora. Aquí porque está pequeño sí le decimos a la gente que se espere (para entrar) cuando se nos junta, pero no tenemos termómetro", admitió Edgar Gómez, encargado de una tienda de ropa.
También, y contrario a lo que ocurrió al inicio, es menor el número de negocios que mantienen barreras o cintas de contención en los locales, así como señalética en el piso, para controlar los aforos y el flujo de los clientes, lo que ocasiona que al final las personas se aglomeren.
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