Impulsar un modelo de capacitación y sensibilización de las diversas áreas de gobierno, así como de los programas de atención a los menores para entender mejor y prevenir el abuso sexual infantil y, sobre todo, el ciberdelito a través del cual se difunden imágenes de menores de edad, señaló Maye Villa, presidenta del DIF Guadalajara.
Al participar en el Encuentro Internacional para Lograr un Mundo Digital Libre de Material de Abuso Sexual Infantil, indicó que es “necesario reconocer que la explotación sexual y material de abuso sexual, la venta y tráfico de niñas y niños representan no sólo un crimen de violencia contra la niñez y adolescencia, sino que implican también formas de explotación con fines económicos de una de la peores explotaciones del trabajo infantil”.
Ante ese escenario, urge a que se impulse un modelo de sensibilización que no atienda únicamente las consecuencias sino las causas del problema, en donde se exija siempre la impartición de justicia.
Por si no lo viste:
“Con una profunda convicción de proteger, garantizar y restituir los derechos de la niñez y la adolescencia, estamos tomando cartas en el asunto y, es por eso, que estamos configurando un modelo de sensibilización y capacitación que abarque todos los programas” a través de los cuales se atienen a los menores.
Dijo que el primer paso que se debe de dar es reconocer que “lo que se nos ha salido de las manos, es común escuchar testimonios de padres y madres de familia que aceptan haberse dado cuenta de que sus hijos estaba envueltos en este fenómeno de violencia, mucho tiempo después, cuando la situación se volvió insostenible”, por eso dijo que es necesario prevenirlo.
Agregó que con la sensibilización y empatía que se logre como sociedad se podrá sentir como propia la situación que los demás viven, pero también es necesario impulsar una cultura de la denuncia.
Mientras que Eduardo Cruz Moguel, presidente de la Fundación Paz, dijo que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) consideró este problema como el crimen encubierto más prolongado de la historia y que alcanza al 30% de las niñas y niños antes de que cumplan los 18 años y en México existen más de 20 millones de sobrevivientes de abuso sexual infantil.
“Muchas veces creemos que el agresor sexual es el señor del parque, el de la gabardina, pero la realidad es que más del 90% de los casos de abuso sexual infantil sucede por un conocido y en más del 80% de los caso por un familiar, es decir papás, tíos, abuelos, el problema está dentro de las familias y sucede igual en todas las clases sociales. Sólo uno de cada 10 menores que lo padece lo podrá hablar”, indicó.