Jhoana Nava Rodríguez, estilista y cultora de belleza certificada desde hace más de dos décadas. De niña peinaba a sus hermanas y sus muñecas, incluso cortaba el cabello; todos se quedaban sorprendidos por la habilidad y emoción con que realizaba esta actividad.
Esa agilidad y esa inquietud por embellecer a sus muñecas la llevó a estudiar y certificarse. Por un momento hizo pausa al casarse y tener a sus dos hijas, su adoración y por quien se ha esforzado más de lo que imaginó y luchado por darles una mejor calidad de vida y una profesión.
Te puede interesar:
El camino no ha sido fácil para Jhoana luego de su divorcio. Sin dinero y un cúmulo de emociones volvió a revivir su pasión por la belleza femenina; se capacitó y abrió en su casa un espacio para iniciar en mundo del emprendimiento económico.
Desde entonces ha festejó los cumpleaños de sus hijas, XV años, educación, salud, operaciones y está a un paso de consolidar su máximo sueño ver a sus hijas graduarse de abogada y en administración de empresas en la Universidad de Guadalajara.
Yoa no mira el pasado ni las barreras: “Me divorcié, tenía a mis dos niñas pequeñas de dos y tres años, entonces me vi en la necesidad de trabajar y puse mi negocio con la ayuda de mi madre. Ya había estudiado estilismo y cuando me divorcio me veo en la necesidad de trabajar sin descuidar a mis hijas llevándolas a la escuela por eso decidí poner una estética”.
Para Johana no hay horario, llega a trabajar más de 12 horas, combina su negocio con ser mamá emprendedora, enfermera, cocinera y hasta orientadora de su cliente: “Aprendí mil cosas con mi hija, necesidades de mi hogar porque no tenía que pagar que me la pintaran o arreglaran”.
Aunque hay momentos en que el miedo invade prefiere dar un suspiro y romper con todas esas barreras que llegan a enfrentarse las jefas de hogar por buscar nuevas innovaciones para sus negocios.
“Mi mayor preocupación eran mis hijas el cómo las iba a sacar adelante, ese era mi miedo; ahora que entraron a la universidad y ya están por culminar su licenciatura fueron muchos obstáculos pero mucha alegría y satisfacción. Todos los días que me despierto son nuevas oportunidades que le agradezco a Dios”.
Ese entusiasmo de Johana no ha cambiado, su misión es servir y aconsejar a sus clientes. Mujeres y hombres salen contentos de su negocio quienes no solo acuden por un corte, peinado, tinte o maquillaje sino por una palabra de aliento.
Ana Mercedes Hernández Díaz, estilista profesional certificada. Ana es jefa de familia, tiene dos hijas, un hijo y también cuida a su mamá. Hace cuatro tenía como meta tener su propio negocio: “AH estudio, 100% femenino con giro de belleza, salud y academia. Ser emprendedora certificada y jefa de familia no fue fácil, pero su misión la impulsó a consolidar su sueño. “Fue un reto porque uno como madre soltera se enfrenta a la discriminación social y los comentarios de que no vas a poder y ¿Cómo siendo mamá soltera puedes tener algo así?, es el reto de decir '¿quieres ver que sí lo puedo hacer?' . Te enfrentas a estos cuestionamientos, eso para mí fue un impulso para seguir adelante”.
Ana se promociona en las redes sociales y todos los días se capacita para estar al día con las nuevas novedades en la belleza femenina y dar clases. Platica que el miedo personal muchas veces la llegó a paralizar ahora se muestra más segura, empoderada y contenta por estar en el mundo de los negocios y productivo y dedicar más tiempo con sus hijas e hijo. “El miedo no me permitía disfrutar y ahora yo disfruto lo que me gusta. Mi emprendimiento es estar con mi familia, manejo mis horarios, agendo mis citas, descanso más días para los eventos de mis hijos, antes era una empleada y no podía disfrutar de los beneficios que hoy tengo, ir a las festividades de mis hijos y entrega de calificaciones”.
Consolidar el aprendizaje que empodere a mujeres
Su visión siempre fue abrir un negocio propio y hace un año y medio que acude a una academia de belleza ubicada en la colonia Constitución en Zapopan para lograrlo. Ana se ha abierto camino sola; ha consolidado una de sus metas de superación, pero su visión va más allá: ampliar su negocio y afianzar la academia de belleza femenina para empoderar a más mujeres que tienen el talento.