No importa dónde... en el rancho, la playa o la gran ciudad, a las bodas o matrimonios religiosos no siempre se les acompaña con un ritual o lo folclórico, al estilo Jalisco. Se han perdido usos y costumbres, pero no faltará el novio vestido de charro que llegue a caballo, en calandria o mínimo brindar con tequila y el "Son de la negra" interpretado por los mariachis.
Te recomendamos:
Aquí todavía prevalece la superstición y la cábala. En algunos municipios, los novios no se ven por dos días y al llegar el día de la boda, él la espera en el altar y la novia sale de casa tomada del brazo del padre de familia acompañada con la banda de música del pueblo hasta llegar a la iglesia.
El trayecto puede ser caminando, en carroza o montada a caballo, dependiendo el estilo y la tradición de cada familia. Sigue el cortejo nupcial integrado por los padres, padrinos de velación y de arras (las monedas que representan el anticipo de riqueza del matrimonio), seguido por las damas de honor y al final entra la novia vestida de blanco con una cauda larga agarrada por los pajes al ritmo de la marcha nupcial.
En Tlajomulco, tradición Franciscana
En Tlajomulco de Zúñiga, ubicado a casi 40 kilómetros del Centro Histórico de Guadalajara, los monjes franciscanos buscar conservar su máxima tradición.
En esta costumbre, los novios se colocan una corona de pan al centro de la cabeza, la cual lleva confeti y colaciones, y un collar de dulce conocido como alfeñiques, mientras que las familias del novio y la novia se arrojan huevos de confeti, esto simboliza que arreglarán cualquier conflicto que pueda existir entre ellos.
Te puede interesar:
Al final de la ceremonia se les obsequia a los asistentes un vaso de nieve de garrafa y un pan llamado fruta del horno.
La maestra Eva Angélica Guerra Avalos del Departamento de Turismo, Recreación y Servicio del Centro Universitario de Ciencias Económico-Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) mencionó que en Jalisco algunas tradiciones se han perdido.
“Han cambiado algunas cosas, antes las familias de la novia pagaban por la fiesta y era la tradición y la costumbre, y ahora no necesariamente se hace eso (…) otros cambios es que anteriormente las invitaciones de novia que eran impresas, primero se ponía los nombres de los padres y prácticamente eran los padres los que invitaban a las personas asistir a la boda de sus hijos, hoy en día en las invitaciones ya no aparecen los padres, porque son los propios novios los que costean tanto la ceremonia como la fiesta, ese es un cambio de valores”.
Casarse con traje de charro
El vestuario tradicional en Jalisco es el de charro, incluye la chaquetilla, chaleco, el pantalón y la camisa y como accesorios el moño y el sombrero; en ella, un vestido de chinela de colores vivos y con bordados o de manta y reboso, dependiendo el gusto y el estilo.
Otro modelo es que la novia en su ajuar lleve una prenda nueva, vieja, prestada y uno más en tono azul como símbolo de buena suerte, lo que no se debe es portar perlas, porque estas simbolizan tristeza y llanto.
Dentro de la ceremonia religiosa se intercambian los anillos matrimoniales que van en el dedo anular, pues este representa que tiene la conexión con el corazón, la entrega de arras significa abundancia y dinero en el matrimonio y el rodear a los novios con un lazo, símbolo de unión.
Al final la novia, que porta tres ramos florales, deja uno en el templo como una ofrenda a la virgen, otro lo arroja durante la celebración familiar y el último lo conserva; al salir del templo a la pareja se le arroja arroz como símbolo de prosperidad.
Se conserva el banquete en el convivio familiar como una birria, pozole o pepián y arroz.
Bodas de tres días
En las localidades tradicionales de la tierra del mariachi se celebran tres días seguidos y en cada uno de ellos hay cazuelas de comida. Para la tornaboda (al día siguiente de la boda) la novia prepara el atole blanco para el desayuno y lava todas las cazuelas, demuestrándo así que está lista para casarse.
En los bailes se conserva el vals, el baile de los billetes para ayudar a la pareja con sus gastos, la canción de "A la víbora de la mar" en donde la novia arroja el ramo y la liga; también se carga al novio de muertito, que significa que dejó de estar soltero, son las tradiciones más arraigadas.
En algunas familias, principalmente en los pueblos de Jalisco, la fiesta se extiende hasta un día o dos para el famoso recalentado y el baile con la banda del pueblo.
En Atemajac de Brizuela, la fiesta comienza desde que se "pide la mano"
En Atemajac de Brizuela el ritual comienza desde que “piden la mano” de la novia. Un año o seis meses antes del compromiso nupcial, el novio acude a la casa de la novia a cumplir con esta tradición, pero no va solo, lo acompaña su familia y sus padrinos de bautizo, además de la música de banda o mariachi, si el padre de familia de la novia abre la puerta y autoriza el ingreso es señal de que acepta el compromiso y los recibe con una cena.
La pedida de mano tiene que ser de noche: “Para festejar 'la pedida de mano' de la novia, en ese momento se toca la música, por lo general los padres de la novia quieren que haya música en señal que hay unidad en la familia. Los padrinos de bautizo de ambos siempre tienen que estar presentes, su figura es importante en ese momento”, narró Lupita Gaytán, originaria de ese municipio.
Durante la cena se acuerda la fecha del matrimonio para comenzar con los preparativos de la boda y el novio ya tiene permiso de ingresar a la casa de la novia y elegir quienes serán sus madrinas y padrinos de boda, de Biblia, de rosario, de cirio, de mancuerna, de arras.
No dejes de leer:
A 24 horas antes de la boda, la familia y la futura pareja acuden al lugar donde se celebrará la fiesta con el objetivo de que todos participen en este compromiso, y en el día acordado se realiza la saca, un desayuno fiesta que significa que es el último día de que la novia está en la casa de sus papás.
“Prácticamente no se duerme, después de arreglar el casino te levantas a las cuatro o cinco de la mañana para acudir a la casa de la novia, ella recibe a las y los invitados, a la familia del novio, a los padrinos y madrinas que asistirán a la boda, deben tener el desayuno preparado y el novio tiene que llevar música para la hora de la saca, mi papá pedía mariachi”.
Lanzan cohetes: “Hay canela, ponche, el alcohol no falta y el desayuno puede variar”.
La novia acude al hogar de los padrinos de bautizo para prepararse y salir vestida de blanco roto (color puro) para dirigirse al templo acompañada con la banda de música. “Las que son pedidas se casan de blanco roto en la misa de doce, solo es para ellas”.
Al final, los recién casados recorren el kiosco del jardín acompañados con música de banda hacia el casino en donde ambas familias se unirán, entonces se escuchará en varias ocasiones el grito de ¡vivan los novios!